En una carta abierta, el presidente Sandro Rosell dice que sería un privilegio tener a la cabeza de la Iglesia Católica en el estadio viendo jugar a Lionel Messi.
El nuevo jefe de la Iglesia Católica, el Papa Francisco, es un ferviente partidario del club San Lorenzo, y ha sido objeto de mucha atención por parte de los equipos desde su nombramiento en el Vaticano el mes pasado.
Estrellas como Lionel Messi y Javier Mascherano afirman que sería un privilegio tener al Papa en un partido.
Rosell dijo en una carta publicada en El Mundo Deportivo: "Como presidente del Barcelona es un honor compartir con usted más que el fútbol ya que nuestro interés común, como los colores al juego de nuestros equipos son más que evidentes.
"Me gustaría darle la bienvenida a asistir a ver un partido de la caja en el Camp Nou y disfrutar de nuestros jugadores, principalmente su compañero Messi y Mascherano compatriotas, que han apoyado este saludo por su firma en esta carta".