Investigadores australianos han desarrollado una nueva tecnología que les permite, por primera vez, filmar un pepino de mar nadando en aguas profundas, también conocido como "monstruo de pollo sin cabeza", en aguas del Océano Austral frente a la Antártida Oriental.
El pepino de mar, que solo se ha filmado antes en el Golfo de México, se descubrió utilizando un sistema de cámara submarina desarrollado para la pesca comercial de palangre por la División Antártica Australiana (AAD).
Se espera que la tecnología de cámara australiana pionera que capturó las raras imágenes del organismo, la eximia de Enypniastes, pueda ayudar al impulso de larga duración para la creación de una nueva zona de conservación antártica.
La tecnología se basa en una carcasa que protege la cámara y los dispositivos electrónicos y está "diseñada para adherirse a los palangres en el Océano Austral, por lo que debe ser extremadamente duradera", dijo el líder de AAD Dirk Welsford, refiriéndose a un tipo de línea utilizada para pesca de mar profundo.
"Necesitábamos algo que pudiera lanzarse desde el costado de un bote, y continuaríamos operando confiablemente bajo una presión extrema en el tono negro durante largos períodos de tiempo".
Los datos de las cámaras se envían al organismo internacional que gestiona el Océano Austral, la Comisión para la Conservación de los Recursos Vivos Marinos Antárticos (CCRVMA).
"Algunas de las imágenes que estamos recuperando de las cámaras son impresionantes, incluidas las especies que nunca hemos visto en esta parte del mundo", dijo Welsford en un comunicado emitido por la CCRVMA.
"Lo más importante es que las cámaras brindan información importante sobre las áreas del fondo marino que pueden soportar este tipo de pesca y las áreas sensibles que se deben evitar", agregó.
Los datos recopilados de las cámaras se presentan en la reunión anual de la CCRVMA que comienza en Hobart el lunes, donde se propondrá una nueva área de protección marítima.
La gran área frente a la costa de la Antártida Oriental, que es rica en corales de aguas frías y alberga el lugar donde se alimentan los pingüinos, ha sido durante mucho tiempo el objetivo de crear un área de protección.