Brasil abrió un proceso penal contra los ex líderes de izquierda Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff por supuestamente recibir sobornos con dinero desviado del gigante petrolero estatal Petrobras.
El Partido de los Trabajadores (PT) de los dos ex presidentes ha negado enérgicamente los cargos, calificándolos de "maniobra escandalosa" con motivos partidistas.
Además de Lula y Dilma Rousseff, están implicados el actual presidente del PT y varios ex ministros.
El fiscal general Rodrigo Janot presentó una queja el año pasado alegando que los acusados conspiraron para formar una organización criminal que recibió 1,480 millones de reales (ahora $ 390 millones) de sobornos en dinero desviado del estado.
Su presentación fue aceptada por el Tribunal Federal este viernes 23 de noviembre, que pidió al acusado que presentara su defensa en un plazo de 15 días.
Son los primeros cargos penales presentados contra Dilma Rousseff, quien llegó al poder en 2010 y fue reelegida en 2014 antes de ser acusada en 2016 por supuestamente manipular las cuentas públicas.
Lula está cumpliendo una condena de 12 años por aceptar un apartamento junto al mar como soborno durante su presidencia de 2003-2010.
Asimismo tiene al menos otros tres procedimientos ante los tribunales.