Martes 23 de abril 2024 | Contáctenos
La relación entre el presidente estadounidense Donald Trump y los demócratas en el Congreso de los Estados Unidos se ha tensado a más no poder. Ninguno de los lados quiere dar su brazo a torcer en las negociaciones.
Los demócratas de la Cámara de Representantes y del Senado le niegan de plano la aprobación de la solicitud presidencial de 5 mil millones de dólares para echar a andar la construcción del muro en la frontera sur de los Estados Unidos. Mientras que Donald Trump ha hecho saber que si el monto le es negado decretará el cierre parcial del Gobierno de los Estados Unidos.
Hace un par de días, el domingo 16 de diciembre, el consejero de la Casa Blanca, Stephen Miller, dijo a CBS que el Gobierno de Estados Unidos se encontraba al borde de sufrir un cierre parcial porque los demócratas en el Congreso no conceden los 5.000 millones de dólares que la Administración de Donald Trump estima que su país requiere de miras a construir el muro en la frontera con México.
Por su parte, en el curso de la semana pasada, el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, había señalado que estaría "orgulloso" de adoptar la medida de cerrar el Gobierno de la federación si de obtener la suma solicitada se trata. No obstante, fiel a su estilo, desde entonces el mandatario ha suavizado su mensaje: "¡No hagamos un cierre, ¡demócratas, hagan lo correcto para el pueblo estadounidense!".
A pocos días de la fecha final de la negociación, el próximo 21 de diciembre, Donald Trump no cuenta con el apoyo que requiere en el Congreso. En ese contexto, los demócratas han propuesto no superar los 1.600 millones de dólares de miras a mejorar el cercado existente y adoptar otras medidas de seguridad en la frontera sur. Igualmente, han ofrecido mantener el financiamiento actual de 1.300 millones de dólares.
Por su parte, el líder del Partido Demócrata en el Senado de los Estados Unidos, Chuck Schumer, ha hecho saber que los miembros de su partido en el Senado no cederán. Ayer lunes 17 de diciembre, el senador Schumer dijo que dependía de Donald Trump el cierre de las operaciones del Gobierno norteamericano.
La situación se torna complicada para Donald Trump, pues en Estados Unidos las leyes federales, como la que concierne a la construcción del muro fronterizo, deben obtener 60 votos en el Senado. En la cámara alta los republicanos cuentan con 51 de los 100 escaños, 9 menos de los que se necesitan para la aprobación de la medida.
Sin embargo, de decretarse el llamado cierre del Gobierno en esta oportunidad, a diferencia de otros cierres presupuestarios similares, dado que el Congreso ya aprobó un financiamiento para un 75 por ciento de las ramas del ejecutivo, el corte de los fondos cercana las fiestas de fin de año tendría un alcance limitado.
No obstante, la perturbación generada por la posible medida afectará a Departamentos como el Seguridad Interior, de Justicia, de Vivienda e incluso al Departamento de Estado. Y pondrá a miles de empleados en licencia, sin goce de haber.
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