El presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, firmó un memorando, autorizando al Departamento de Defensa a crear un Comando Espacial, una nueva estructura organizativa dentro del Pentágono que tendrá el control general de las operaciones espaciales militares.
El comando también tendrá la tarea de acelerar los avances técnicos y encontrar formas más efectivas de defender los activos estadounidenses en el espacio, incluidas las vastas constelaciones de satélites de las que dependen las fuerzas estadounidenses para la navegación, las comunicaciones y la vigilancia.
La orden de Trump está separada de su objetivo habitual de crear una "Fuerza Espacial" como una rama de servicio armado independiente, pero se considera un paso en esa dirección. Los críticos de una Fuerza Espacial han dicho que está mal orientado y que el dinero debería gastarse en iniciativas y programas en la tierra, incluida la educación y la mejora del acceso a la atención médica.
El movimiento iniciará un proceso largo y complicado, que requerirá que el Departamento de Defensa reúna a varias unidades y agencias espaciales de todos los servicios militares en una organización más coordinada e independiente, informó Associated Press, citando a dos funcionarios estadounidenses no identificados.
La medida recreará un Comando Espacial de los EE. UU., que existió desde 1985 hasta 2002. Se disolvió luego de los ataques del 9/11 para que el Comando Norte de los EE. UU. pudiera establecerse.
Las funciones del Comando Espacial fueron absorbidas por el Comando Estratégico de los EE. UU., y la Fuerza Aérea mantuvo su papel principal en el espacio a través del Comando Espacial de la Fuerza Aérea.
El nuevo comando podría costar hasta $ 800 millones en los próximos cinco años. La financiación se incluirá en el presupuesto para el año fiscal 2020, que se dará a conocer en febrero.
El ejército ha intentado durante décadas reorganizar y acelerar los avances tecnológicos en el espacio. Algunos culpan a la Fuerza Aérea por la falta de inversión en el espacio porque prefiere gastar en aviones de combate.