Lo más importante: la lucha contra la corrupción.

Es evidente que lo que más quiere la ciudadanía es: 1) lucha contra la corrupción, 2) lucha contra la inseguridad ciudadana 3) empleo decente y 4) educación de buena calidad.

En cuanto a la lucha contra la corrupción, cierto es, hay avance, pero se requiere mucho más.

Pensando bien, la lucha empezó atacando a Alan García y Keiko Fujimori, principalmente. Luego vendrán otros.

Pensando mal, el equipo que nos gobierna es corrupto, tiene alianzas políticas con marxistas de toda índole y por eso defenestró al Ex Fiscal de la Nación Chavarry con el fin de controlar el Ministerio Público y esconder su corrupción.

Ya se firmó el acuerdo con Odebrecht, probablemente un juez lo declarará válido. Y la nueva "pagina 11" será más temprano que tarde juzgada y eventualmente sancionada, moral, política y quizá, legalmente, por perjudicar el interés económico y la integridad del Estado peruano.

Ahora, con todos los nombres y las pruebas ya dadas y por dar, por parte de los corruptos de Odebrecht y sus ex-empleados, los fiscales que luchan contra la corrupción tienen todo tendido para terminar de investigar y juzgar debidamente a los corruptos nacionales, sean estos funcionarios, públicos o empresarios privados, entre otros.

Sin embargo, los fiscales que luchan contra la corrupción son relativamente pocos y carecen de todos los medios que necesitan para que la lucha contra la corrupción no sea a cuenta gotas, sino a paso redoblado y firme.

El Ejecutivo, es decir el MEF, con la aprobación del Consejo de Ministros, tiene entonces que destinar más recursos humanos y económicos a la lucha contra con la corrupción. Los fiscales que luchan contra esta plaga tienen que ser más en número, por lo menos el doble de los que hay en la actualidad, muy seriamente escribiendo. El monto total es, sin duda, absorbible por el Estado peruano.

Y por cierto, los nuevos fiscales deben ser tan buenos como los mejores que tenemos hoy. Y ellos, deben tener también los bienes y servicios que necesitan para avanzar correctamente, en vez de excusarse públicamente por esta falta de recursos y dejar de estar mirándole la cara a los administradores que manejan dichos recursos para obtener lo que necesitan.

Una de la mejores pruebas de sinceridad del Ejecutivo, comenzando con el Presidente Vizcarra, en cuanto a la lucha contra la corrupción se refiere, es darle a los fiscales y por extensión a los jueces que participan en esta lucha, los recursos que son necesarios y de ninguna manera menos.

De lo contrario, la ciudadanía estará más propensa a pensar mal del equipo que nos gobierna y de sus aliados. Ellos serán señalados como los verdaderamente corruptos. Y esto es grave para nuestra democracia y desarrollo.