El gobierno de Nicaragua acordó liberar a los presos de la oposición dentro de los 90 días para reanudar las conversaciones de paz estancadas destinadas a poner fin a una crisis política de 11 meses, según un mediador del diálogo.
Luis Angel Rosadilla, el enviado especial de la Organización de Estados Americanos (OEA), dijo en una conferencia de prensa ayer miércoles que el gobierno del presidente Daniel Ortega había acordado liberar a "todas las personas detenidas en el contexto de las protestas" que comenzaron en abril del año pasado, dejando a más de 700 personas entre rejas y 325 muertos.
No se dio el número exacto de presos que debían ser liberados.
Rosadilla expuso seis puntos, acordados por el gobierno y la oposición, que estarán en la agenda de las conversaciones de paz. Estos incluyen el "fortalecimiento de los derechos de los ciudadanos" y las "reformas electorales".
Una vez que se hayan acordado todos los puntos discutidos en la mesa de negociación, "se pedirá a la comunidad internacional que suspenda las sanciones para facilitar el derecho de Nicaragua al desarrollo humano, económico y social", dijo.
El grupo de la oposición, la Alianza Cívica, dijo que se pondrían en contacto con la Cruz Roja el jueves para elaborar un calendario de liberación de los presos, informó el diario La Prensa.
Las conversaciones del gobierno se reanudaron con la oposición el mes pasado luego de que un primer intento de acuerdo se desmoronara, pero se rompió nuevamente cuando la oposición condicionó las conversaciones a la liberación de los presos políticos.
El gobierno de Nicaragua se ha visto afectado por las sanciones de EE. UU. y la amenaza de más por parte de la Unión Europea desde que surgieron los problemas el año pasado.