Miércoles 24 de abril 2024 | Contáctenos
El cuidado de la cavidad bucal es muy importante, en especial mantenerlo saludable por medio de la higiene, ya que los residuos alimenticios que se quedan en los dientes después de desayunar, almorzar o cenar se fermentan por acción de las bacterias que se encuentran colonizando en la boca pudiendo correr el riesgo de dañar las piezas dentales si no se les cepilla al menos tres veces al día.
“Es indispensable eliminar cualquier resto alimenticio que quede en las superficies dentales, sobre todo si son carbohidratos fermentables, ya que por el accionar de las bacterias que se encuentran en la boca éstos producen ácidos que son los responsables de desmineralizar la superficie dentaria, produciendo la caries dental”, detalló Gina Bustamante Reátegui, directora ejecutiva de Salud Bucal del Ministerio de Salud (Minsa).
De acuerdo a la Guía de Práctica Clínica para la Prevención, Diagnóstico y Tratamiento de la Caries Dental en Niñas y Niños, la caries dental es una disbiosis (desequilibrio) manifestado por un consumo alto de azucares, así mismo es una enfermedad influenciada por los estilos de vida, por ejemplo malos hábito de higiene (falta de cepillado dental) y malos hábitos alimenticios (alimentación alto en azúcares).
Carbohidratos y caries
Diversos estudios han demostrado una relación estrecha entre el consumo de carbohidratos fermentables y la caries dental.
Entre los carbohidratos fermentables podemos mencionar el azúcar de la fruta, la lactosa o azúcar de la leche. Estos se encuentran también en la leche y productos a base de leche. Los fructanos se encuentran en panes, cereales y pastas. Los galactanos, presentes en los frijoles y otras legumbres, también pertenecen al grupo de los hidratos de carbono fermentables.
El gusto por este tipo de alimentos puede comenzar desde muy temprano por influencia de la familia, los amigos y la escuela.
“La recomendación para todos es lavarse los dientes como mínimo dos veces al día, sobre todo antes de dormir. Si las personas no lo hacen dejarán restos en los dientes que continuarán fermentándose, incrementando el riesgo de desarrollar caires dental”, dijo Bustamante.
Desde los 6 a 9 meses
Gina Bustamante Reátegui, indicó que el cepillado de dientes con pasta fluorada debe hacerse desde que aparecen los primeros dientes (dientes de leche).
“Los padres deben estar atentos a la erupción de dientes, por ejemplo, los incisivos inferiores entre los 6 a 9 meses. A esa edad ya se deberían empezar con el cepillado porque los bebés empiezan su alimentación sólida”, preció.
La medida de pasta dentífrica para los menores de tres años no debe superar el tamaño de un grano de arroz. A partir de los tres años, la cantidad debe ser del tamaño de una arveja, indicó la especialista.
“Los riesgos de no cepillarse los dientes son diversos pero principalmente la caries dental y las enfermedades gingivales (encías) o periodontales. Existe una relación con el estado de salud bucal con el estado de salud en general”, refirió la experta.
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