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Lunes 17 de agosto 2020

Fieles a un propósito

Por: Grover Pango Vildoso
Fieles a un propósito
Foto: Difusión

 

grover_german@yahoo.es


Estamos en agosto y los tacneños recordamos el retorno de nuestra tierra a la administración peruana. El mérito es de nuestros abuelos pero somos nosotros los que celebramos. Fueron ellos los que tomaron la decisión de seguir siendo peruanos y esa es una lección ejemplar y conmovedora.

Lo que ningún tacneño debiera desconocer –y esa es tarea que padres de familia y profesores deben asumir con las nuevas generaciones- es que ése fue un propósito, una decisión asumida el 10 de marzo de 1884. Estaba en su inicio la aplicación del Tratado de Ancón y se esperaba la realización del plebiscito que decidiría el destino de las provincias cautivas. En ese momento, un grupo de notables ciudadanos tacneños y ariqueños suscribieron un documento en el que decidieron “permanecer fieles a la nación peruana y unidos siempre al Perú, nuestra Patria, seguir junto con él la suerte que la Providencia le tenga reservada.”

Es este un dato histórico de gran importancia. Sin mediar alternativa, reparo ni condición, juraron ellos y asumimos nosotros fidelidad absoluta con el Perú para seguir juntos cualquiera sea su suerte. Difícil encontrar mayor demostración de lealtad.

La historia contemporánea nos ofrece numerosos ejemplos de decisiones alcanzadas por los pueblos en atención a sus ideales o necesidades. Sudáfrica puede ser un buen ejemplo.

Si nos preguntamos qué necesita el Perú debemos responder que tenemos en deuda la construcción de nuestro destino. Lograrlo exige que contemos con una población que, creciendo en su condición de persona humana, consiga el anhelado crecimiento colectivo. Que cada peruano sea mejor es la gran tarea por cumplir.

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