Pac-Man: ¡Feliz 30º Aniversario!

A finales de la década de 1970, la oferta de videojuegos destinados a las máquinas recreativas (a veces llamadas “fichines”) se encontraba bastante estancada. A pesar de seguir siendo un negocio muy rentable, una gran parte de los juegos disponibles parecían ser simples “clones” de “Space Invaders” o alguna clase de combate espacial. Los jugadores comenzaban a aburrirse de disparar contra marcianos pixelados, y demandaban algo nuevo. En este contexto hizo su aparición un nuevo videojuego cuya mecánica era completamente diferente a todo lo conocido: Pac-Man.

Pac-Man es un producto de la empresa japonesa Namco. La idea del juego nació en 1979, cuando Toru Iwanati, un joven diseñador de videojuegos de 25 años que trabajaba en esa empresa, estaba comiendo. Según cuenta la leyenda, Iwanati acababa de cortar una pizza cuando -al coger la primera porción- se quedó mirando lo que quedaba de ella:  un círculo con una especie de boca. En ese momento se le ocurrió la idea de un nuevo juego de vídeo. A principios de 1980, con la ayuda del programador Shigeo Funaki y otros tres empleados de la compañía, Toru terminó de programar el videogame, que fue bautizado como “Puck-Man”, el mismo nombre que tenía su personaje principal. En japones, “Puck” proviene de la onomatopeya paku, que corresponde al sonido que se produce al abrir y cerrar la boca, algo muy apropiado para un personaje que pasaba todo el tiempo comiendo “píldoras” blancas dentro de un laberinto. El 10 de mayo de ese año comenzó a ser distribuido en el mercado japonés, convirtiéndose en un éxito instantáneo. Rápido de reflejos, el fabricante de videojuegos Midway compró los derechos para comercializarlo en los Estados Unidos, aunque decidió cambiarle el nombre. Los responsables de Midway temían que algunos usuarios demasiado “creativos” raspasen parte de la “P” de “Puck” para convertir el nombre grabado en los gabinetes de las maquinas de arcade en “Fuck-Man”. Así fue como nació finalmente “Pac-Man”. La reacción de los usuarios ante el juego de Iwanati fue abrumadora, sorprendiendo incluso a sus creadores. El propio presidente y fundador de Namco, Masaya Nakamura, en esa época decía que “nunca imaginé que Pac-Man fuese a convertirse en un éxito internacional de estas proporciones. La gente conoce Pac-Man. Personas que ni siquiera saben nada sobre videojuegos, saben qué es Pac-Man. Definitivamente, no imaginábamos que fuera a transformarse en el éxito que se ha convertido.”

Como decíamos, el planteo del juego era diferente a todo lo que se había visto hasta ese momento. Un disco amarillo con una enorme boca recorría un laberinto comiendo puntos blancos. Dentro del laberinto habitaban también cuatro fantasmas llamados Shadow (Blinky), Speedy (Pinky), Bashful (Inky) y Pokey (Clyde), que recorrían los pasillos intentando comerse a Pac-Man. Estos fantasmas eran, respectivamente, de color rojo, rosa, azul  y naranja. Cada uno de ellos tenía un comportamiento ligeramente diferente. Mientras que Blinky era muy rápido y perseguía efectivamente a Pac-Man, Inky era bastante lento y a menudo evitaba el encuentro con el personaje principal. Dentro del laberinto también había cuatro “píldoras” de mayor tamaño que proporcionaban a Pac-Man -durante pocos segundos- la habilidad  de “comerse” a los fantasmas. Cuando se acababan los puntos blancos, Pac-Man pasaba al siguiente nivel. A pesar de su sencillez (o gracias a ella) el juego se hizo extremadamente popular.

“Pac-Man” tiene 255 niveles. A medida que se van superando, cada uno posee mayor velocidad que el anterior y el efecto de las “pastillas grandes” dura menos tiempo (con la excepción del nivel 6 en el que el efecto dura unos segundos más que en el 5) y en determinado momento el juego se hace tan rápido que estos puntos especiales no tienen ningún efecto sobre los fantasmas. En el laberinto también suelen aparecer algunos objetos -frutas, llaves, etc.- que proporcionan puntaje adicional al ser comidos. No son muchos los que logran atravesar los 255 niveles del juego. Hubo que esperar casi 20 años para que en 1999 el jugador Billy Mitchell lograse por primera vez jugar una “partida perfecta de Pac-Man”, es decir, atravesar los 255 niveles con la puntuación máxima (3.333.360 puntos) sin ser atrapado nunca por los fantasmas. Si bien existe un “nivel 256”, lo cierto es que debido a un desbordamiento del contador encargado de “recordar” el numero de la pantalla actual (una variable del tipo byte que solo puede almacenar números menores a 256) hace que el juego se desmorone, mostrando una pantalla llena de caracteres incongruentes prácticamente injugable. Este nivel se conoce como “Kill Screen"

El día de ayer el buscador Google aprovechó el aniversario del nacimiento del Pac-Man para  publicar en la pantalla de su buscador el primer “doodle interactivo”, que permite jugar una partida -de uno o dos jugadores- de Pac-Man. Se cambió el botón "Voy a tener suerte" por uno que dice "Insertar Moneda", y el tablero del juego incluye las letras de la palabra “Google”. El juego en cuestión también tiene 255 niveles, y se suma a las miles de versiones de Pac-Man que -desde 1980- se han escrito en todo el mundo.¡Feliz cumpleaños Pac-Man!