Sábado 18 de mayo 2024 | Contáctenos
En la ciudad francesa de La Rochelle empieza este viernes la Universidad de verano del Partido Socialista Francés con la mirada puesta en los sondeos de opinión y en la preparación de las elecciones presidenciales del 2012. Desde su victoria en las últimas elecciones regionales del mes de marzo, los socialistas han logrado salir de la profunda crisis provocada por la victoria presidencial de Nicolas Sarkozy en 2007 y de la guerra fratricida entre la ex candidata Ségolène Royal y la primera secretaria del partido Martine Aubry.
Los sondeos de opinión más recientes publicados por el diario Libération, dan por vez primera ganadora a la izquierda en las próximas elecciones presidenciales de 2012. 55% de franceses afirman preferir la victoria de la izquierda en 2012. Sin embargo la desconfianza reina y 57% de las personas consultadas declaran que “la izquierda una vez en el poder, no será mas eficaz que la derecha”.
La Universidad de verano va a reunir a la dirección y a cerca de cuatro mil militantes del Partido Socialista bajo el lema: “La vida que queremos”. Los debates sobre el proyecto socialista de alternancia para 2012, serán al mismo tiempo un test de preparación de las elecciones primarias para designar al candidato a la presidencia. Todos los tenores del Partido acudirán a la Rochelle, a excepción de Dominique Strauss Khan muy ocupado en sus funciones de director general del FMI, Fondo Monetario Internacional.
Los sondeos más recientes muestran que Strauss-Khan es muy popular y en caso de duelo presidencial, Strauss-Khan-Nicolas Sarkozy, el socialista ganaría con 59% de votos contra 41%. En caso de duelo Martine Aubry-Sarkozy, la socialista llegaría en cabeza con 53% contra 47%, según esa misma encuesta.
En su puesto de Secretaria general del Partido, Martine Aubry ha ganado puntos en la dura tarea de reconciliar a todas las corrientes socialistas, y se impone cada vez más como candidata natural del Partido. Su rival Ségolène Royal, ex candidata a la presidencia sin haber enterrado el hacha de la guerra, ha moderado sus críticas y ha aceptado la reconciliación, sin renunciar por eso a un papel protagónico. Las dos dirigentes socialistas han firmado por ahora un pacto de no agresión, en espera de que la base del Partido decida quien debe ser el candidato en 2012...
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