Una de las reformas sociales en la agenda del nuevo presidente colombiano es la restitución a los campesinos desplazados de las tierras que en su momento les fueron expropiadas por la guerrilla, los paramilitares, los narcotraficantes o los latifundistas. Juan Manuel Santos dijo que quería que “los campesinos del país se convirtieran en los verdaderos dueños de las tierras más productivas y los encargados de explotarlas”. Ciertamente una de las políticas más prometedoras de la actual coyuntura colombiana, según varios analistas, pero también una de las más difíciles. En Colombia la concentración de tierras es tal que tan sólo el 4% de los propietarios controla el 61% de las tierras de mejor calidad. Se calcula que unas cinco millones de hectáreas fueron abandonadas de forma forzada, y 385.000 familias expulsadas...Escuchar más en rfi