Francia tiene un encuentro difícil contra Turquía en el Mundial de Baloncesto

Los doce gigantes, no es un apodo, es una realidad, dura para los “pequeños franceses”. Y esto va mucho más allá de la diferencia en el tamaño medio de los dos equipos (1,99 m contra 2,02 m). El entrenador turco, el montenegrino Boscia Tanjevic, dispone de pivots de más de 2,10 m, Omer Asik (2,14 m) y Semih Erden (2,11 m), que esta temporada dejan ambos el Fenerbahce para evolucionar en la NBA (Chicago y Boston) y de una serie de jugadores de 2,08 m que pueden evolucionar en varias posiciones con el creador Hedo Turkoglu, los aleros interiores Ersan Ilyasov y Gonlüm Kerem, y el lanzador Oguz Savas. “Hasta ahora, nadie ha sido capaz de jugar contra ellos en el interior”, hace notar de Vicente Collet. “Pero es importante que la bola vaya al interior de la zona. No debemos jugar balonmano”, añadió.La zona a la manera de Tanjevic El riesgo de jugar en círculo alrededor de la zona y disparar tiros desde larga distancia es un juego peligroso, aún más si sabemos que los pivots franceses no están en buena forma y que el equipo turco marca en zona. Sobre el primer punto, Ali Traore probablemente mostrará su mejor juego a Tanjevic, el entrenador que lo lanzó al ASVEL e hizo ir a Roma, donde fue director general. Sobre el segundo punto, Vincent Collet señala que la defensa en zona, un 1-3-1 a la manera de Tanjevic, la "defensa mixta con un montón de trampas" muy diferente a la de los lituanos, "resuelve el problema de tener un equipo muy grande”, en consecuencia menos móvil. “No se mueve mucho, pero ella trata de llenar los espacios, a nosotros de aprovechar ello”, dice Boris Diaw. “Tenemos que jugar en los intervalos que se nos presentan. Desde hace dos años, atacamos mejor la zona. Los equipos hacen mucho menos contra nosotros”, añadió.  La amenaza IlyasovEn el otro lado del campo, será necesario también tomar la medida de esta “masa física”, como resume Vincent Collet. A falta, como siempre, de un líder de envergadura, la creación del juego se basa en gran medida en la versatilidad de Turkoglu, que deberá ser controlado por Nicolas Batum. Pero como Hedo perdió su capacidad de disparo en Toronto (9,8 puntos al 32%), el líder de la selección está claro que es hoy Ersan Ilyasov (16,5 puntos, 8 rebotes). “Sera necesario estar más cerca de él de lo que estuvieron otros equipos”, advierte Collet. “Tenemos la capacidad para hacerlo", señala. Florent Pietrus y Boris Diaw se dedicarán a limitar su influencia, a sabiendas de que los jugadores franceses siempre cambian en las pantallas y que deberían también a ayudar a controlar a los pivots. "Vamos a tener que mostrar una gran agresividad a fin de cerrar sin embargo nuestra zona”, dijo Collet.

Vía L’Equipe