En la reunión de este miércoles del Consejo de Ministros, el Presidente de la República Nicolas Sarkozy ha dado el tono de la respuesta gubernamental tras la poderosa movilización sindical de la víspera. Firmeza y concesiones. Firmeza sobre la edad legal de la jubilación, que pasa de 60 a 62 años, pero ciertas concesiones sobre dos temas sensibles en la argumentación sindical: los trabajos más duros y perjudiciales para la salud y el dispositivo de carreras largas que concierne a las personas que empezaron a trabajar desde los 18 años.
El jefe del Estado propone una reducción del 10%, en el texto actual es del 20%, del nivel de incapacidad que deberá permitir que un trabajador se jubile a los 60 años, si ha efectuado en su carrera un trabajo muy duro y peligroso para su salud. El dispositivo relativo a las “carreras de larga duración” será así mismo examinado para permitir que una persona que empezó a trabajar muy joven y cotizó el número de años requerido pueda jubilarse a los 60 años, o incluso antes, con los mismos derechos.
Nada nuevo en el horizonte de las propuestas gubernamentales, ya que Nicolas Sarkozy ha confirmado que no dará marcha atrás, pese a las manifestaciones masivas de la víspera. Sarkozy se ha declarado muy “atento” a las inquietudes y preocupaciones expresadas en la movilización sindical, pero sin ceder en lo esencial: la edad legal de la jubilación.
Las organizaciones sindicales se encuentran a su vez reunidas este miércoles y anunciarán esta tarde la respuesta que se preparan a dar al jefe del Estado, con la convocatoria de una nueva movilización nacional, cuyas modalidades deben ser finalizadas. “Ningún gobierno puede hacer oídos sordos a una manifestación de tal amplitud” ha declarado por su parte el secretario general de la CGT Bernard Thibault...
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