El inminente triunfo de Susana Villarán

¿Por quiénes votarán los electores nacionalistas para la alcaldía de Lima? ¿Por quiénes votarán los electores apristas, sin Carlos Roca?, ¿por quiénes votarán los electores del ex-candidato Alex Kouri? En una palabra, ¿por quiénes votarán los electores del nacionalismo, fujimorismo y aprismo, para la alcaldía de Lima ? ¿Y los electores toledistas? Sinesio López en su artículo "El primer tiempo" ( 02.09.2010) nos da una respuesta con su tesis de los" vasos comunicantes" existentes entre los electores de los partidos que no presentan candidatos en Lima, a la que llega "analizando las cercanías ideológicas y sociológicas".¿De qué electores se trata ? Se entiende, de los sectores populares, aquellos que hacen inclinar la balanza. Es decir, es probable que  voten por Susana Villarán: los electores que no han sido víctimas del "terrorismo mediático"; los que han desarrollado un sentimiento anti-Lourdes en la campaña de Kouri (candidato solapado del fujimorismo y alanismo); los apristas que no aceptan la propuesta del "voto en blanco" o "voto viciado" levantada por el "alanismo" (para favorecer a Lourdes Flores); los toledistas críticos a la alianza con "el partido de los ricos"; y, los nacionalistas que comprenden que una conducta diferente favorecerá, a la larga, al enemigo que Ollanta Humala tendrá en las elecciones  del 2011.El viento social sopla a favor de Susana Villarán y, si aplicamos la tesis de "los vasos comunicantes" de Sinesio López, la tendencia será ascendente. Contraria a la de Lourdes Flores, a quien Alan García no puede devolverle el favor del 2006, pues, su partido está seriamente averiado.Desbaratada la campaña de psicosociales desatada por los "terroristas mediáticos" de la derecha, la candidatura de Susana Villarán ha tomado nuevos bríos y, salvo algún imprevisto, las fuerzas que luchan por una democracia sin corrupción, por una economía nacional sin entreguismo y por oportunidades de trabajo digno, habrán ganado "el primer tiempo". El " segundo tiempo" también podrá ser nuestro si se continúa avanzando en la recuperación del sentimiento unitario y conquistando más voluntades para el cambio.