El sargento de policía estuvo infiltrado 27 meses en el esquema de seguridad del líder militar de las FARC. Una guerrillera le dio los datos sobre su escondite, según un informe de inteligencia revelado por el diario colombiano El Tiempo. La muerte del ‘Mono Jojoy’ representa el “principio del fin” de la guerrilla, asegura Santos desde La Macarena.
El sargento infiltrado se hizo pasar por un guerrillero durante más de dos años hasta que obtuvo datos certeros del búnker: la geografía de la zona, las características del escondite y los movimientos de unos mil hombres del círculo del líder de las FARC, Víctor Julio Suárez, alias ‘Jorge Briceño’ y ‘Mono Jojoy’. El espía consiguió datos precisos del búnker a través de una guerrillera.
“La recta final de ‘Sodoma’ arrancó hace un mes. Para agosto, el suboficial infiltrado recibió la misión de prestar guardia en el tercer anillo de seguridad y se encontró con su amiga en una de las patrullas de reconocimiento… ella le contó que iba para el campamento grande, el que tenía el búnker. Esa fue la señal”, explica El Tiempo.
El espía escapó hace diez días “simulando una grave intoxicación que hizo que lo llevaran a un pueblo cercano… sus compañeros lo fueron a buscar para ponerlo a salvo y recabar la información”, dice el informe que aclara que para la guerrilla quedó como un desertor más...
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