"Son toneladas de piedra sobre esta gente", precisó el portavoz de la gobernación de Antioquia. Las autoridades cifran entre 20 y 30 las personas que quedaron atrapadas tras el deslave del pasado lunes en una carretera en el oeste de Medellín en un lugar conocido como el Manglar.
El terreno es tan peligroso que la vida de los socorristas que trabajan buscando a los sepultados estaría en peligro según el funcionario. Las tareas de búsqueda se retomaron esta mañana pero ya con pocas esperanzas.
El terreno es muy “inestable en la pared superior del derrumbe: al lado izquierdo hay unas grietas de un metro de ancho y sigue lloviendo el agua puede penetrar y hacer presión y desencadenar una nueva avalancha”, se lamentó Jorge Humberto Moreno, portavoz de gobernación.
En el lugar se han concentrado familiares y allegados de los desaparecidos. Sólo 12 familias se han manifestado para denunciar la desaparición de personas o recuperar sus cuerpos. Las autoridades calculan que debajo de las piedras habría entre 20 y 30 personas.
Hay 200 rescatistas que trabajan en las labores debúsqueda pero a medida que pasan las horas se instala el pesimismo. “Han pasado muchas horas. Ya no hay posibilidades de encontrar a nadie vivo”, insistía este miércoles Moreno...
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