No votarán ni por la candidata oficialista Dilma Rousseff, ni por el socialdemócrata José Serra en la segunda vuelta electoral programada para el 31 de octubre próximo. La incógnita ahora es saber a qué lado de la balanza se inclinarán los casi veinte millones de votantes que optaron por la candidata verde Marina Silva en primera vuelta.
Disputado por dos fuerzas políticas, el más de 19 por ciento de los votos obtenidos por los verdes queda ahora a disposición de la voluntad de los electores. “No somos los propietarios de esos votos”, dijo Alfredo Sirkis vicepresidente del Partido Verde (PV) de Brasil a RFI dejando abierta la posibilidad de que tanto los militantes y algunos dirigentes del Partido Verde pueden optar por uno u otro candidato.
El PV brasileño tomó esta decisión en el marco de su convención partidaria en Sao Paulo, en una votación casi unánime, luego de la cual la ex candidata presidencial Marina Silva expresó que su coalición se mantendrá en “la posición de mediadores para que el proceso electoral tenga los mejores resultados”.
La también ex ministra de Medio Ambiente del actual mandatario Inacio Lula Da Silva agregó que “esa independencia favorecería a la democracia” de su país...
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