APRA: "Debemos seguir siendo la reserva moral"

Debemos seguir siendo la reserva moral Lo acepto; no es tiempo de catacumbas, donde todo era sacrificio y se era capaz de dar incluso la vida por la fe de nuestro colectivo; hoy no hay cárceles que prueben nuestro temple. El boato, la concupiscencia y la ausencia total de liderazgo partidario y frente a los problemas nacionales nos pasa la factura a diario. Se nos formó para ser la reserva moral; mientras todos nuestros adversarios caían ante la sensualidad del poder o las prebendas que otorgan el sistema; nosotros éramos una isla de fe, de sacrificio. Así fuimos diseñados. Tenemos ejemplos de vida, muchos de ellos familiares. Conocimos a héroes sencillos; apristas de estirpe, como Florencio Barreto, a quien tanto extraño. Y lo menciono, porque nunca pidió nada y lo dio todo; aprista irredento, nacido en territorios de ocupación chilena. Qué falta nos hacen los seres como él, frente a los egos desmedidos de nuestros representantes en el actual Parlamento; compañeros obnubilados ante la pizca de poder en manada. Un Perú boyante no lo es todo; el Perú tiene hoy menos alma que hace diez, veinte años; simplemente porque tiene un aprismo más pequeño, porque cada vez encarnamos menos la reserva moral. Ese fue el legado de Víctor Raúl, diseñar una manera diferente y reivindicativa de ser peruanos; además tiene un Apra dividida cubileteando en candidaturas, cuando la tarea más importante debiera ser la recomposición de las huestes. Tengo la profunda convicción que el Perú nos necesita; pero en nuestros puestos, no de furrieles del antiaprismo embadurnado de un cacareado verbo pragmático so capa de modernismo. Nos necesita al lado del pueblo. Estamos cada vez desideologizándonos más; desfraternizándonos más. Creo en la necesidad de un gran reencuentro, inclusivo. Demostremos al país, que tenemos un alma más grande que las otras opciones. La historia atisba nuestros actos.  Magdalena Del Mar, 21, octubre del 2010  Julio Garrido Huyanate