La polémica reforma del sistema de pensiones debe ser votada este viernes en el Senado francés. Un voto que se hará en medio de un ambiente explosivo, con manifestaciones de estudiantes y bloqueos en varios depósitos de carburante. Los sindicatos anunciaron dos nuevas jornadas de protestas.
Todo indica que la guerra abierta entre el gobierno y los opositores al proyecto de reforma no tiene un fin próximo. Al contrario, las partes en conflicto han radicalizado sus posiciones sumiendo al país en el caos.
Prueba de esta situación, los piquetes se multiplican en refinerías y depósitos de carburante, mientras que las fuerzas del orden reciben órdenes para levantar los bloqueos. Así sucedió el viernes en la refinería del grupo petrolero Total de Grandpuits, al noreste de la capital, instalación que fue bloqueada por manifestantes y desbloqueada luego la policía.
Con estas acciones ilustra la determinación del gobierno de frenar las numerosas protestas de los trabajadores ante el voto inminente de la polémica reforma de las pensiones. Los desbloqueos de refinerías es una de las prioridades de las autoridades tras varios días de conflicto que han provocado el desabastecimiento de 20% de las estaciones de gasolina del país...
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