La policía alemana intervino a golpe de matracas y gases lacrimógenos contra un grupo de unas 250 personas que intentaban retrasar el tren cargado con desechos altamente radioactivos, cerca de su destino final. En respuesta los militantes atacaron a los policías utilizando bengalas.
Los enfrentamientos se produjeron cerca de Metzingen, a unos 30 km del destino del convoy, el centro de almacenamiento de Gorleben (norte de Alemania).
Desde el viernes, los militantes ecologistas y antinucleares han multiplicado las acciones para detener o retrasar este tren que salió de la ciudad francesa de Le Havre cargado con 123 toneladas de desechos reciclados altamente radioactivos.
Los residuos fueron procesados en una planta del grupo nuclear francés Areva y calificado por los militantes como el “transporte radioactivo jamás realizado” hasta ahora.
Las principales técnicas de los ecologistas ha sido encadenarse a las vías del tren o colgarse de los puentes, así como retirar el balasto de los rieles. El sábado se realizó una manifestación gigante en Dannenberg, cerca del centro de Gorleben, en la que se congregaron unas 50.000 personas...
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