Cuando un migrante centroamericano pisa México, es casi seguro que sea secuestrado y que en algunos casos les corten la lengua. De acuerdo con estimaciones oficiales, seis de cada 10 mujeres serán violadas durante la travesía de intentar llegar a Estados Unidos. A veces sus cuerpos son encontrados enterrados con alambre de puas en pies y manos, masacrados con armas de grueso calibre de uso militar.
“Siempre en el tema de la migración nos hemos visto como los marginados en relación con Estados Unidos, pero somos el victimario más feroz”, asegura Gael García Bernal. El actor tapatío sabe de lo que habla. Hoy estrena Los invisibles, una serie de cortos documentales alusivos que codirigió con Marc Silver.
La producción fue hecha por invitación de Amnistía Internacional y podrá ser vista a través de YouTube (youtube.com/invisiblesfilms). En la producción, se recogen testimonios de migrantes centroamericanos, algunos hospitalizados luego de ser atacados, y de mexicanos que se han dedicado a defenderlos desde su trinchera. Además, se recorre el panteón donde descansan sus cuerpos y se citan datos de la situación que actualmente se vive. “El ejercicio fue increíblemente natural, agarramos unas cámaras y nos fuimos para allá. La idea era documentar eso como un diario”, dice García Bernal vía telefónica.Sarah Shebbeare, productora ejecutiva de Los invisibles, trabaja en el Secretariado Internacional de Londres como encargada de campañas sobre México. Ella explica porqué eligieron a Gael García para este documental.“Era la persona obvia para ayudarnos con este proyecto. Sabíamos que ya tenía un interés en este tema, había producido Sin nombre meses antes y es una persona bastante comprometida con los derechos humanos”. La idea, dijo Shebbeare, se le dirigió al Presidente Felipe Calderón para pedirle la colección y publicación de datos nacionales sobre los abusos a migrantes y las acciones emprendidas para que los responsables rindan cuentas. “Creemos que estos datos permitirían un diagnóstico de la situación y serían un primer paso fundamental en mejorar la protección a migrantes”, expresó la funcionaria. Su nueva aventura Los invisibles representan la cuarta ocasión en que Gael García Bernal se pone atrás de la cámara. Primero hizo la ficción Déficit y después formó parte del colectivo del largometraje 8, en donde estaban los reconocidos cineastas Jane Campion, Wim Wenders y Gus Van Sant. Posteriormente dirigió una historia para el filme Revolución, la cual se estrena en telvisión el 20 de noviembre, donde tocó un tema religioso. — ¿Qué te atrajo del proyecto? — Platicando con Amnistía surgió la idea de hacer los cortos y que fueran como un diario de viaje, con tintes periodísticos en algunos casos, yéndonos directamente a los puntos que se querían resaltar. Agarramos las cámaras y nos fuimos para allá cinco días; fuimos encontrando historias. Son relatos que conmueven, como la adolescente que violan o la mujer que cuenta cómo mataron a su hermano. Y los hicimos mucho antes de que se supiera de lo de Tamaulipas (migrantes “levantados” y asesinados), no se sabía tanto del tema y que tampoco el mayor peligro para los migrantes es el secuestro. — Los documentalistas son personas que deben comprometerse para poder sacar un proyecto equilibrado. — Lo que quisimos era hacer un diario de viaje. No era la intención última sacar una película, simplemente documentar el acontecer y nos topamos con esto. Los formatos tradicionales no ayudan a que nos acerquemos más, los migrantes al final se convierten en un conteo, en una especie de marcador como lo es el narco y sólo de eso nos enteramos. Pocas veces nos damos cuenta de quiénes son, qué sueños tenían, qué deseaban, y eso no se acaba con la película, sigue después con el comentario de todos.
Fuente: Informador.com