Doña Letizia Ortiz no deja de sorprendernos. A pesar del aspecto que le exige su cargo no deja de ser una mujer joven y con mucho interés por la cultura. Bon Jovi es uno de sus grupos favoritos y tras conocer que iban a dar un concierto en el Price de Madrid no tardó en contactar con el local para acudir al show que diera el de New Jersey el pasado sábado por la noche.
Ese mismo día tenía que acudir a Santiago de Compostela a recibir a Su Santidad el Papa Benedicto XVI pero desde la Casa Real se llamó al Price para comentar que el Príncipe de Asturias quería acudir al concierto con unos amigos, en ningún momento se comentó que Doña Letizia asistiría. El problema estaba en que las entradas estaban agotadas desde hacía semanas.
No sabemos cómo se las arreglaron los promotores pero la sorpresa fue mayúscula cuando la futura Reina de España se presentó con su look más rockero y con cinco amigas, ni rastro del Príncipe. Se sabe que entró por el garaje y una vez iniciado el concierto que, todo sea dicho, ha sido uno de los peores conciertos en la historia de Bon Jovi ya que a la hora y cuarto se fue del escenario, regresó, tocó dos temas más y hasta siempre gracias.
Desde la última fila de la tribuna pudo ver la Princesa de Asturias el concierto, los que habían pagado religiosamente fueron transladados a mejores localidades, que luego continuó en la fiesta en el backstage que montó el cantante en compañía de Rihanna. Hasta la 1 de la madrugada estuvo presente en el local para luego regresar a su domicilio. La Princesa ha dado una gran lección al mostrar que disfruta, como cualquier hijo de vecino, en un concierto de su grupo favorito. Arriba la Princesa del rock.
Fuente: lacosarosa.com