WikiLeaks revela que Washington indagó sobre el perfil psicológico de la plana mayor del gobierno argentino. Buenos Aires intercedió a favor de La Casa Blanca como mediador regional y fue una pieza fundamental para que el candidato de EE.UU. se impusiera al frente de la Agencia de Energía Atómica de la ONU.
"¿Cómo controla Cristina Fernández de Kirchner sus nervios y su ansiedad? ¿Cómo afecta el estrés a su conducta con sus asesores y/o en su proceso de toma de decisiones?". "¿Qué medidas toma Cristina Fernández de Kirchner o sus asesores para ayudarla a manejar el estrés? ¿Toma alguna medicación? ¿En qué circunstancias controla ella mejor el estrés? ¿Cómo le afectan las emociones en su proceso de toma de decisiones y cómo baja la tensión cuando está angustiada?". Estas preguntas fueron transmitidas por el Departamento de Estado norteamericano a la embajada estadounidense en Buenos Aires en un cable fechado el 31 de diciembre de 2009, diez meses antes del fallecimiento del ex presidente Néstor Kirchner. Los norteamericanos sondearon también la salud de este último, caracterizado en un memorando de 2006 por su carácter muchas veces “errático”, consigna el diario francés Le Monde.
"Es bien conocido su temperamento, ¿ha demostrado mayor tendencia a oscilar entre extremos emocionales ¿Cuáles son los objetivos más comunes de la furia de Néstor Kirchner?". Esto es apenas de un botón de muestra de los esfuerzos de Washington por conocer los más íntimos resortes del poder en Argentina, país citado entre 3.000 y 4.000 cables de los 251.287 divulgados el domingo por WikiLeaks...
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