"Creo que a largo plazo, la derogación de la ley reforzará nuestra fuerza militar y nos permitirá estar mejor preparados. (La derogación de la ley) reflejará mejor el país que servimos", dijo el almirante Mullen en declaraciones a la comisión de las Fuerzas Armadas en el Senado.
La llamada ley 'Don't ask, don't tell' ('No preguntes, no digas'), sancionada en 1993, obliga a los militares gays y lesbianas a callar su homosexualidad bajo pena de exclusión. La Casa Blanca quiere que el Senado la derogue antes de fin de año, al igual que el secretario de Defensa estadounidense, Robert Gates.
Un estudio del Pentágono difundido el martes muestra que el 70% de los 115.000 militares y 44.000 cónyuges de militares consultados son favorables a la derogación de la ley.
Fuente: yahoo.es