Entre enero y noviembre, 96 ballenas jorobadas (jubarte) fueron encontradas encalladas, muertas o vivas, en el litoral brasileño, lo que representa un alza del 123% con respecto al récord anterior de 2007, cuando se contaron 43 de estos cetáceos encallados en Brasil.
Estas ballenas miden entre 13 y 14 metros y pesan unas 25 toneladas cuando son adultas, recuerda Folha.
La mayoría de estos animales encallaron en las costas del estado de Bahía (noreste), que registró un total de 36 de estos incidentes. Espirito Santo registró 30 casos. Ambos estados albergan sitios de reproducción de estos mamíferos.
"Es difícil definir la causa de su muerte. El animal llega a veces en estado de descomposición, lo cual dificulta la autopsia", explicó Paulo Flores, responsable del programa oficial de conservación de cetáceos, quien remarcó que muchas veces se hace difícil poder devolver los animales que llegan vivos al mar.
Científicos consultados por el diario evocaron como potenciales causas del fenómeno el cambio climático, que reduce el volumen de krill -base de la alimentación de las ballenas- disponible, lo cual podría debilitar a las ballenas y a sus pequeños. Otra posibilidad señalada es un virus o bacteria que las afecte.
Fuente: yahoo.es