El presidente guatemalteco Álvaro Colom decretó el estado de excepción en el departamento de Alta Verapaz, fronterizo con México, para luchar contra el narcotráfico. Sin embargo, no todos los pobladores de la zona concernida por la medida parecen estar al tanto.
El presidente de Guatemala, Álvaro Colom, decretó el domingo el estado de sitio en el departamento de Alta Verapaz para luchar contra los narcotraficantes que operan en la frontera con México.
La iniciativa del Gobierno, que “durará el tiempo necesario”, apunta a recuperar el control de una zona indígena maya utilizada por Los Zetas, ex brazo armado del cartel mexicano del Golfo, para llevar la droga a Estados Unidos. Colom admitió que los narcos controlan importantes extensiones de los casi 109.000 km2 del territorio guatemalteco y es responsable de muchos crímenes violentos en el país. El estado de sitio suspende varios derechos constitucionales como la libre organización y protesta, y permite al gobierno ordenar la detención de sospechosos de alterar el orden público. Además queda prohibido el porte de arma de fuego, salvo para las fuerzas de seguridad...
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