La nieve vuelve a dejar a Bélgica prácticamente paralizada

El aeropuerto de Bruselas Sur-Charleroi ha retomado las operaciones esta mañana, después de verse obligado a cerrar anoche por las condiciones meteorológicas.

Un total de 18 vuelos fueron cancelados, dejando en tierra a más de 2.000 pasajeros, de los que varios centenares pasaron la noche en la terminal del aeropuerto, según los medios locales.

"El aeropuerto ha reabierto, pero eso no quiere decir que todos los vuelos vayan a despegar. Aconsejamos a los clientes consultar la web del aeropuerto antes de salir", ha señalado un portavoz del aeródromo a la agencia Belga.

Mientras, en el aeropuerto internacional de Bruselas continúan registrándose numerosas cancelaciones y retrasos por el mal tiempo, aunque se ha solucionado la falta de líquido anticongelante que impidió operar con normalidad esta semana.

El aeropuerto de Lieja, que ayer se vio obligado a cerrar durante varias horas, ha reabierto hoy y a él se han desviado algunos de los vuelos que no pudieron aterrizar en Charleroi.

Por su parte, el tráfico por carretera experimenta enormes dificultades, en especial en la parte sur y centro del país, donde continúa nevando hoy.

Los autobuses no circulan ni en Valonia ni en Bruselas ni en gran parte de Flandes y la red viaria acumula más de 500 kilómetros de atascos, aunque la normalidad va recuperándose poco a poco.

Varias carreteras continúan por el momento cortadas al tráfico y en muchas zonas se ha prohibido circular a los camiones, que durante la noche bloquearon algunas importantes arterias como la principal autopista que conecta Bélgica con Luxemburgo.

Los trenes sí circulan en el país, aunque lo hacen con numerosos retrasos y cancelaciones a causa de la nieve.

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