Cada vez que Michael Jackson emprendía una gira se encontraba exhausto, deshidratado y no podía dormir, indicaron personas que viajaron con él. Por tal motivo, la defensa del Dr. Conrad Murray -principal sospechoso de causar la muerte del cantante- usará ese argumento para indicar que debido a su próxima serie de shows en Londres, Jackson estaba bajo mucha presión y solicitaba medicamentos para dormir. De acuerdo con la página tmz.com, el estado físico en el que caía el cantante en giras, como “Bad” y “Dangerous”, puede constituir suficiente evidencia para comprobar que Murray no mató al "Rey del Pop". Semanas antes de su muerte, Jackson anunció una serie de conciertos que tendrían lugar en Londres y aunque nunca realizó la gira, gente cercana a él indica que se encontraba en mal estado físico y necesitaba sustancias para dormir. La preparación del tour "This is It" fue especialmente agotadora, porque se trataba de una gran cantidad de conciertos y Jackson estaba aterrorizado ante la posibilidad de fallar. Según la teoría de la defensa de Murray, que se dio a conocer la semana pasada, Jackson sentía una gran presión por la gira y como no podía dormir pedía su Propofol, sin embargo, el día de su muerte y luego de que el médico le aplicara una cantidad, el propio Jackson, accidentalmente, se inyectó una dosis fatal de la sustancia, lo que provocó su deceso.
Fuente: Informador.com