Cabral divulgó una nota oficial en la que explica que ha pedido a la Marina la participación de tropas, de aviones de transporte y de equipos especializados en el socorro a las víctimas, que de acuerdo a datos no oficiales manejados por algunos medios locales podrían llegar a 60, pese a que Defensa Civil sólo ha confirmado 37.
La tragedia comenzó a gestarse durante la noche de este martes, cuando unos fuertes temporales que aún se abaten sobre algunas zonas del estado de Río de Janeiro se ensañaron con una región serrana, en la que se han registrado deslizamientos de tierras que han sepultado un número no determinado de viviendas.
La situación más crítica se presentaba en Teresópolis, una ciudad situada en montañas cercanas a Río de Janeiro, donde el número de fallecidos confirmados era de 32, aunque las propias autoridades temen que irá en aumento a medida que avance el rescate.
El departamento de Defensa Civil consideró particularmente "grave" la situación en las localidades de Nova Friburgo e Itaipava, vecinas a Teresópolis, en las que se han registrado al menos cinco muertos.
Las autoridades admitieron que se trata solamente de "balances parciales", que sólo podrán ser completados una vez que acaben las labores de los equipos de socorro.
Según cifras manejadas por algunos medios locales, no confirmadas aún en forma oficial, los muertos ya serían más de 60 en las varias localidades fluminenses afectadas por el desastre.
El vicegobernador del estado de Río de Janeiro, Luiz Fernando Pezao, se desplazó a algunas de las zonas afectadas por las lluvias y, en declaraciones a la radio CBN, calificó de "desesperanzador" el panorama que observó desde un helicóptero.
"Quien se encuentre en un lugar seguro que intente no salir a la calle", dijo Pezao, quien consideró lo ocurrido como una "verdadera calamidad".
En varias ciudades de la región serrana de Río de Janeiro la situación se agravaba por la falta de energía eléctrica y otros servicios básicos, como el abastecimiento de agua potable, que fueron interrumpidos por daños causados por los temporales.
Las lluvias que se abaten sobre Río de Janeiro siguen a las registradas este martes en el vecino estado de Sao Paulo, donde al menos trece personas murieron por causa de las inundaciones o los deslizamientos de tierra provocados por las lluvias.
La mayor preocupación de las autoridades paulistanas se centraba hoy en la localidad de Franco da Rocha, en la región metropolitana de Sao Paulo y cuyo casco urbano permanecía casi por completo bajo las aguas.
Tanto en Río de Janeiro como en Sao Paulo, las autoridades de Defensa Civil han comenzado a preparar diversos cargamentos de ayuda humanitaria que serán distribuidos en las regiones más críticas, una vez que las condiciones del clima lo permitan.
Fuente: yahoo.es