El prestigioso Festival de Cine de Palm Springs (California) rindió homenaje el pasado jueves a Michael Douglas. Era la primera aparición pública del actor tras el anuncio de su recuperación y su esposa, Catherine Zeta-Jones, quiso estar a su lado.
La esposa del actor de Wall Street: El dinero nunca duerme estaba bellísima con un vestido color vino de pronunciado escote. Su rostro irradiaba felicidad y cuando Douglas subió a recoger su premio no pudo ocultar la emoción al escuchar sus palabras: "El cáncer nos ha unido más aún y me ha hecho apreciar los pequeños detalles del día a día".
Sin duda, una de las peronas que más ha padecido la enfermedad, además del propio actor, ha sido su esposa y madre de sus dos hijos, Catherine Zeta-Jones. La actriz galesa renunció a varios proyectos profesionales para estar al lado de su marido y según publica la revista People, "gritó de felicidad" al conocer que la radiación y la quimioterapia habían acabado con el tumor de su marido.
Fuente: Hola