Al parecer la renuncia de la ex ministra Mercedes Araoz a la candidatura presidencial por el partido aprista, da por culminados los forcejeos entre la ahora excandidata y el secretario general de dicha organización Jorge del Castillo por definir el primer lugar de la lista congresal del partido de la estrella. Un espectáculo vergonzoso en el que un veterano político, se aferra como enajenado a la teta del estado y una ciudadana, se le pretende restringir sus derechos de elegir a ser elegido a otro ciudadano en nombre de la decencia y la moral, en medio del aplauso de los que se olvidan de una norma de fundamental del derecho: “todos son inocentes, hasta que se demuestre que son culpables”.
El congresista de la república y jefe de campaña de Perú Posible, Carlos Bruce, se pregunta en su estado de facebook, si la “repentina” renuncia de Mercedes Araoz se debe a su escasa aceptación en las últimas encuestas. Es una hipótesis muy valedera, no en el sentido de que la escasa aceptación en las últimas encuestas de la candidata Mercedes Araoz, sea la motivación expresa de su renuncia, pero si en el contexto en que se dan. Es obvio que el forcejeo entre la exministra y el secretario general del APRA ha tenido un rebote en las masas del aprismo, lo cual necesariamente tendrá que influir en el aparato de campaña poco motivado a jugarse el todo por el todo por una candidata que no pertenece a sus filas. Personalmente, tengo la impresión de que ha ocurrido algo asi como una doble equivocación en la candidatura de Mercedes Araoz por el partido aprista. Ella se equivoco candidateando por el APRA y el aprismo, erro en ver en el perfil de Araoz a su potencial candidata, ambos el actor individual y el actor institucional, tomaron un camino que les separa de su tradicional nicho de mercado y en la peor de las situaciones posibles para el APRA que viene de afrontar varios escándalos que han dejado lesionada la credibilidad de su dirigencia.
La renuncia de Mercedes Araoz, no tendría tanto que ver con la baja aceptación en las encuestas que viene sufriendo, sino más bien con la escasa posibilidad que tiene de remontarlas sin la colaboración del aparato y la cúpula del aprismo que recordemos en una ocasión tan reciente como las elecciones de las elecciones locales y regionales, abandonaran sin mayor miramiento al candidato por Lima Carlos Roca bajándolo estrepitosamente de la arena electoral ante la falta de apoyo. Podría ser que esta fuera entre otras muchas la real motivación oculta tras la mediática renuncia anunciada por la agraciada ex ministra.
Mercedes Araoz, prometió y cumplió con su promesa de renunciar en caso del Castillo asumiera a encabezar la lista aprista. Sin embargo, el procedimiento formal de la renuncia todavía no se halla en curso; es de esperar que la cúpula aprista todavía tenga algo que decir y la candidata algo que escuchar. Si alguien quiere celebrar la muerte súbita de la candidatura aprista, tendrá que guardar el champagne en la refrigeradora algunos días todavía.Yo esperaría al menos 72 horas, puede parecer una eternidad en la cambiante arena política peruana, pero los compañeros son harto duchos en sacar conejos de sus sombreros. No por gusto estamos ante una organización que apunta para centenaria y como decía mi abuela, antigüedad es clase.