Como no todo pueden ser aciertos y elegancia, en la antesala de los Oscar también hubo equivocaciones y looks demasiado arriesgados, aquellos que en algunas ocasiones traspasan la delgada línea de la originalidad, dejando muy atrás el buen gusto.
Uno de ellos fue Kevin McHale, quien lució una americana de lunares que no dejó indiferente a nadie. Otro que tal baila fue el cantante Seal, quien tampoco pasó desapercibido para los cientos de fotógrafos del evento.
El marido de Heidi Klum optó por un traje satinado combinado con zapatos de aspecto vintage, un look muy poco apropiado para este tipo de eventos, especialmente por el detalle de llevar la camisa desabrochada casi hasta el ombligo.
Por último, el actor Darren Criss, a pesar de no fallar en la elección del esmoquin como prenda elegida para los Globos de Oro, lo echó todo a perder al aparecer con unas llamativas gafas de sol en color rosa fucsia, aportándole un toque hortera que le coloca en los primeros puestos del ranking de los peor vestidos de la noche.
Fuente: Europapress