La intervención televisiva del presidente de la República Nicolas Sarkozy muy criticada por la oposición no ha convencido tampoco a los editorialistas de la prensa francesa. Varios ciudadanos que participaron en el programa han expresado su frustración, tanto sobre el tiempo que les fue acordado como por las respuestas del jefe del Estado.
Aunque los organizadores del programa habían pedido a los participantes que no hablaran con la prensa al acabar la emisión, varios de ellos aceptaron responder a las preguntas de los periodistas y manifestaron su decepción al llegar al hotel en el que habían sido alojados.
“No hemos obtenido las respuestas que esperábamos”, ha declarado Laurent Dauguet trabajador de los astilleros navales que fue seleccionado para discutir con el presidente. Por su parte, Fatiha Djeagaoud, de profesión farmacéutica, manifestó su frustración por el desarrollo del programa, en el que “no tuvieron tiempo suficiente para decir todo lo que tenían que decir”...
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