La reina Isabel II se ha pronunciado respecto a la boda del príncipe Guillermo con su prometida, Catherine Middleton, y lo ha hecho dentro de las ordenes del pasado día 9 de febrero. Entre estas ordenes, que han sido dadas a conocer por el Palacio de Buckingham se puede leer: "Yo declaro mi consentimiento para que se lleve a cabo el matrimonio entre mi gran amado nieto el príncipe Guillermo Arthur Philip Louis of Wales y Catherine Elizabeth Middleton". Este comunicado ha sido firmado y aprobado por la Soberana y publicado en el Gran Sello del Reino. El príncipe Guillermo debió solicitar el permiso real, según una legislación que data del siglo XVIII, que establece que la Reina debe firmar una nota de aprobación bajo el titular del Gran Sello del Reino, en virtud de la Ley de Matrimonios Reales de 1772, que obliga a los descendientes del rey Jorge II a obtener el consentimiento del soberano antes de contraer matrimonio.
Fuente: Hola