No se llevó el Oscar al que estaba nominada como mejor actriz de reparto por su papel en El discurso del rey, sin embargo, Helena Bonham Carter, disfrutó de lo lindo durante su paseíllo sobre la alfombra roja y durante la duración de la gala. Una vez pasada la noche más mágica y esperada del cine, en la que Helena echó el cierre a altas horas de la madrugada tras festejar junto a sus compañeros de reparto el éxito de la cinta de Tom Hooper, la actriz ha puesto rumbo al Reino Unido. Acompañada por su madre, de quien la intérprete ha heredado su estilo, y oculta bajo unas gafas de sol, Helena fue vista en el aeropuerto de Los Ángeles de vuelta a casa.
Fuente: Hola