Se ha paseado por Los Ángeles con un atuendo muy informal cargando ella misma con la caja de madera que contenía la preciada estatuilla dorada. La actriz protagonizó la anécdota de la jornada en lo que a discursos de los premiados se refiere. Estaba tan feliz y emocionada que, en medio del torrente de palabras que salieron por su boca mientras sujetaba con fuerza su Oscar, se le escapó un 'fucking'. Una palabrota que no pudieron escuchar los telespectadores que seguían la ceremonia puesto que la gala se emite con siete segundos de retraso y les dio tiempo a censurar el vocablo.
Fuente: diariofemenino.com