Al principio Selena Gómez y su representante negaban los hechos, y como nadie estaba dispuesto ha afirmar nada dejaron esto a criterio de la imaginación de la gente. Hasta llegaron a pensar que un grupo de chicas enteradas de dónde iba a ser festejado el cumpleaños de Justin Bieber atacaron entre todas a la cantante.
Pero lo sucedido fue que un grupo de chicas, Believers, aguardaron la salida de Justin y Selena con unos paparazzis y le tiraron una botella de agua. Fue ahí cuando el canadiense decidió cuidar y defender a su novia. Al parecer, está bastante enojado con sus fans, pues amenazaban a Gómez.