Todavía en cartelera con Balada triste de trompeta y con resaca por su presidencia en la Academia de Cine, Álex de la Iglesia vuelve feliz en Cartagena a su tarea de director con La chispa de la vida, un cruce tragicómico de Esquilo y Berlanga protagonizado por Salma Hayek y José Mota. "Amo a la Academia, la sigo amando. Pero esto ha supuesto un reseteado de amigos", explica en referencia a su polémica dimisión De la Iglesia, que aunque ahora está en las labores de rodaje de su nuevo filme, convierte cada afirmación respecto a su nueva película en un arma de doble filo.
La chispa de la vida es la historia de un hombre que "no encuentra trabajo, le rechazan, le humillan y, desesperado, busca el hotel donde pasó su luna de miel". Allí, en lugar del establecimiento hotelero, encontrará las ruinas de un teatro romano, donde tras dar un traspiés, acabará con su cabeza atravesada por un hierro y sin posibilidad de moverse ni un milímetro.
Fuente: Hola