James Franco se ha retirado del Twitter, aunque hace unas pocas semanas sucumbió al deseo de crearse una cuenta en la red social. Al parecer, fue presionado por sus patrocinadores, pues sus comentarios afectaban a las marcas, según informó Europapress.es.
El actor se ha despedido de sus seguidores: "Se acabaron los medios sociales. Mi pensamiento era 'este es mi Twitter, puedo hacer lo que quiera', pero ciertas compañías con las que trabajo contactaron conmigo (para hablar) sobre lo que escribía". Es así como el protagonista de 127 Horas, ahora se ha convertido en una de las estrellas que desertan a los encantos de Twitter.