El Empate
por César Campos R. Diario EXPRESO Viernes 06 de mayo
Pese a que la última encuesta privada de Ipsos Apoyo para el banco de inversión Morgan Stanley registra un empate entre Ollanta Humala y Keiko Fujimori, sigo pensando que, técnicamente, la campaña del primero es superior a la de la segunda. Y que si la candidata de Gana Perú no ajusta algunas clavijas de su guitarra electoral, el huayno puede salirle desafinado el próximo 5 de junio. ¿Cómo sustentar una perspectiva de esta naturaleza, contradictoria al avance de Keiko y al traspié de Ollanta en los sondeos de opinión pública? Me baso en tres elementos. Uno es que Ollanta ha jugado más tiempo las cartas de generarse confianza y convencer que ha cambiado, que está cerca de Lula y no de Hugo Chávez, etc. Con ese método ha obtenido respaldos críticos como el de Mario Vargas Llosa. También otros sospechosos y oportunistas con los que posa en su último spot publicitario. El conjunto estaba haciendo la fotografía del hombre moderado, convocante y de brazos abiertos. Keiko demoró algo en esta materia y la suma de Hernando de Soto puede haberle significado mejores aprontes pero eso se verá en la siguiente encuesta.Lo segundo es que Ollanta tiene un cronograma de iniciativas más intenso que el de Keiko, bajo el paraguas del cambio. Le sacó la vuelta al zarpazo que propone su plan de gobierno a los recursos de las AFPs para darle valor a la propuesta Pensión 65 cuyo objetivo social no debería ser tan vapuleado. Y tercero, Ollanta ha jalado hacia su causa redes operativas antifujimoristas que sin confesar su respaldo al comandante pero so pretexto de la defensa de los derechos humanos, el no retorno al periodo de la corrupción o “los intereses populares”, trabajan a tiempo completo de zapa contra Keiko.Todo esto debe seguirse de cerca en el comando de campaña de Fuerza 2011 porque el hipo ventajoso para su candidata sólo se debería a una característica propia de la etapa del ballotage. Olvidamos a veces que estamos en un escenario donde – como el 2001 y el 2006 – casi la mitad de los ciudadanos concurrirán a las urnas por segunda vez escogiendo males menores. Un elemento que no ayuda a afirmar a cualquiera de los candidatos sino a negar al otro. No se vota “por” sino “contra” alguien.En esa línea, la pugna de los postulantes se destaca por atraer percepciones positivas generando miedo hacia el adversario. Y el miedo que todavía no despeja rotundamente Ollanta, la confianza que no ha podido ganar con solvencia, se refiere al sistema de libertades democráticas y económicas en el cual estamos embarcados y que tanto él como sus voceros abrazan con grados supinos de hipocresía. Sobre todo cuando se contrasta sus argumentos ecuménicos de última hora con el plan de gobierno extremista de Gana Perú registrado ante el JNE en diciembre pasado.Caso contrario, después de padecer un ambiente de reacciones negativas por el mal recuerdo del tenebroso autoritarismo de los 90, Keiko vence lentamente esas resistencias. Sin embargo, faltan aún 30 días decisivos e intensos durante los cuales muchas aguas han de correr.