Banner Tuvivienda
Lunes 20 de mayo 2024   |   Contáctenos
Martes 17 de mayo 2011

Los Humala buscan tomar el poder con las armas o las elecciones

Publicado en el diario peruano La Razón el 17 de mayo de 2011
Martes 17 de mayo 2011
Los Humala buscan tomar el poder con las armas o las elecciones

LOS HUMALA AL DESCUBIERTO (I PARTE)

POR ANTONIO TARAZONA RAMÓN (*)“Es preciso interrumpir un silencio, que sería criminal prolongar, y arrancar la máscara de estos hombres, para mostrarlos ante la Iglesia entera tal y como son”. “Pascendi”, San Pío X. Los Humala provienen del distrito de Oyolo de la Provincia Páucar de Sarasara departamento de Ayacucho, en donde aun la población recuerda a don Genaro Humala Narrea -abuelo de Isaac Humala- como un próspero vecino que llegó, entre otras cosas, a donar un ruedo de toros al pueblo. Actualmente, Cusi Coyllur (“estrellita alegre”, en quechua) Humala, apoya en Lima al Movimiento Etnocacerista” y otras hermanas: Imasúmac (“la más hermosa”, en quechua) y Katia, se casaron con ciudadanos belgas, y desde Francia, Bélgica o Lima, laboran como eficaces activistas del “Movimiento nacionalista peruano” (MNP) impulsado por su padre.Es conocido en el mundo político limeño, que el propio padre de los Humala – don Isaac Humala Núñez- en su juventud (1953-1954) integró la “Célula Cahuide”, manejada por el Partido Comunista del Perú PCP desde la clandestinidad, juntamente con estudiantes y profesores de la Universidad Nacional de San Marcos, que se oponían al autoritario gobierno de derecha del general Manuel A. Odría y a su temible ministro de Gobierno, Alejandro Esparza Zañartu.

A este grupo rebelde pertenecieron el ahora prestigiado escritor premio Nobel Mario Vargas Llosa y don Héctor Béjar (después ex jefe guerrillero), autor del libro “Las guerrillas del 68”. Queda anunciado que Vargas Llosa fue “compañero de ruta” de don Isaac Humala, y que el apoyo que recibe en estos momentos Ollanta por parte del escritor, es debido a la vieja amistad con el padre. Estimado lector, en política no hay casualidades sino causalidades. Sigamos repasando los pasos del patriarca de los Humala: Pasado un tiempo, el ahora ideólogo y creador de un partido político Isaac Humala, militó en el guerrillero “Movimiento de Izquierda Revolucionaria” MIR de Luis de la Puente Uceda y Guillermo Lobatón, el poeta Javier Heraud (quienes se levantaron en armas y fueron totalmente aniquilados por las fuerzas del orden). Anterior a este hecho sangriento don Isaac rompió con Luis de la Puente, el Patriarca no pasó del “dicho al hecho.” Posteriormente don Isaac pasó a encabezar el grupo contestatario marxista denominado “Comité Reestructurador del Partido Comunista Peruano”, que se proponía desplazar al líder histórico Jorge Del Prado. El controvertido don Isaac Humala falló en el intento. Me embarga la impresión que el “patriarca” Isaac es fiel seguidor de Nietzsche, igual que Hitler; y que sigue al pie de la letra el siguiente postulado: “Quieres un nombre para este mundo, llámalo Poder, lo resto es bazofia”. El patriarca Isaac Humala, que se desempeña como abogado empresarial, asegura que su apellido es de eximio linaje. “Históricamente somos curacas”, afirma. Estimado lector, observe el parecido con el expresar de su amigo el escritor Vargas Llosa nacido en el Perú; nacionalizado español y titulado como noble, de ser ambos miembros de la Realeza; Vargas Llosa de la española, y el otro de la incaica. Tal actuar me trae a la memoria el dicho criollo: “Hay gente que come frejoles y sin embargo eructan pavo”, al sentirse superiores a los demás; a tal grado que al primogénito de los Humala se le envió a estudiar al Cusco. La pregunta que nos hacemos es ¿Por qué en el Cusco? Por tradición que se remonta a la época de los incas. No es de extrañar que de llegar al poder Ollanta Humala sea declarado por su padre como la “reencarnación” del Inca Manco Capac.

Don Isaac es el creador de una ideología llamada etnonacionalismo. “Somos racistas, por supuesto”, sostiene voz en cuello don Isaac. “De las cuatro razas que existen en el mundo, la cobriza está marginada y nosotros la reivindicamos”. “Cobrizos son los indios; pero además son los cholos, que son cobrizo con blanco; los zambos, con negro; y los injertos, con amarillo”. Explica que el Etnonacionalismo tiene como postulado principal a que la raza cobriza por ser mayoría en el Perú, debería ser la que gobierne el país. “Los blancos son el 3% de la población, por tanto, en un gobierno verdaderamente justo participarían en el 3% del poder, de la economía, de todo”, reflexiona. Don Isaac, es el creador del Instituto de Estudios Etno-geopolíticos (I.E.E.), donde se cultiva su ideología. De tal palo tal astilla

“De tal palo tal astilla”: Los hermanos Antauro y Ollanta se suman a la aventura del padre: El etnocacerismo existe desde 1989, se creó como una forma diferente de luchar contra el terrorismo. A diferencia de los métodos de la alta oficialidad, que atacaba a la subversión mediante una “supuesta represión brutal”, “el Movimiento Etnocacerista tomaba en cuenta, respetaba y se apoyaba en la población civil de los Andes, el actuar militar adoptado por los hermanos Humala es similar a la estrategia implementada por los guerrilleros en la poblaciones que viven en el campo”. Para poder entender el porqué del uso de diferentes tácticas y estrategias implementadas por parte del ejército peruano en su lucha contra la narco-guerrilla en el Perú; y que lograron con éxito pacificar el País fueron contrarias al actuar militar de los hermanos Humala, es indispensable leer la obra “Ensayos sobre América Latina” de Régis Debray. Los Humala utilizaban métodos propios de las guerrillas subversivas. Durante la década de los 90, en el desempeño de sus cargos militares dentro del ejército con la población, los hermanos Humala construían las bases de su ejército revolucionario. Por lo que era de suponerse el final de esta farsa, el mayor Antauro Humala fue retirado del Ejército Peruano, cuando su proselitismo del M.E.C. se volvió contrario e insoportable al real objetivo ejército Peruano. Es conocida la declaración de Antauro, el hermano menor de Ollanta: “A mí siempre me preguntan cómo repotenciar las FF.AA. Yo siempre digo que hay dos vías: La forma de acción A y la forma de acción B”, empieza a explicar el mayor Antauro. “La forma de acción A cuesta dos mil millones de dólares. La B, sólo 60 soles: lo que cuestan dos cacerinas para fusilar a todos los almirantes y generales. Así, en dos días, tenemos al Ejército operativo”, remata. Antauro saboreaba la calculada osadía de sus declaraciones, dado a un corresponsal de prensa. En el retiro, el mayor Antauro ha estado dedicado a convertir al etnocacerismo en el movimiento político que permitirá que la raza cobriza recupere el poder. “Seremos una opción en el 2011”, sentenciaba en las entrevistas que da a los medios de prensa. Fieles seguidores de la formación que desde pequeños le inculcara su padre Isaac, los hermanos Antauro y Ollanta buscan que tomar el poder sea por la vía violenta o utilizando las “elecciones burguesas”, como lo denominan ellos al sufragio electoral. Para materializar ello en el futuro Ollanta y Antauro fueron puestos a estudiar en colegio militar, según el padre: ser militar es la forma más rápida de llegar al poder. Todo está fríamente calculado, nada es casual en la vida política de los Humala. Para llegar a tomar el poder del Estado, los Humala tienen que crear las condiciones objetivas y subjetivas que es requisito para implementar toda revolución armada. Ollanta y Antauro dieron nacimiento a su medio escrito propagandístico: el pasquín Ollanta que significa “el ojo que todo lo ve”. A igual proceder de Lenin, que en el año 1909 creó “Iskra” la chispa vocero oficial de los bolcheviques, y “La Chispa” fue el principal y revolucionario instrumento propagandístico utilizado para la toma del poder en Rusia e implementar el gobierno comunista. A la fecha el pasquín Ollanta no está ya en circulación. Pero, en su momento, “Ollanta”, fue un pasquín quincenal que difundió la ideología etnonacionalista (por espacio de cuatro años) Su valor era de un sol y lo repartían los reservistas reclutados por Antauro. Estos reservistas –llamados “Avelinos”, en honor a Cáceres- no sólo vendían el periódico por calles y plazas, sino que intentaban convencer de su doctrina a sus potenciales lectores y cultivar la conciencia nacionalista. Previamente los “Avelinos” habían sido formados como propagandistas del movimiento en mención. Formación de carácter teñido de segregación racial, muy parecida a la de Adolfo Hitler. “Hay que saber compatriotas que ningún gobernante se ha interesado en la educación del pueblo”, exclamaba Lucho, un “Avelino” que portaba un megáfono, por las plazuelas de Lima, y vendiendo a la vez su pasquín Ollanta. Existían ocho batallones que se dedican a tiempo completo, toda la semana, a repartir el pasquín “Ollanta” por todos los pueblos, ciudades y caseríos del sur del país. Recordemos que un grupo de “Avelinos” fueron enviados a Tambo Grande, y simultáneamente Antauro Humala hizo lo mismo, mandó un batallón a Cajamarca como parte de “su labor de pedagogía y educación política al pueblo”, labor de captación y formación de cuadros. (Leer: La Formación de los Cuadros, de Lenin). Eran casi 80 reservistas dedicados a tiempo completo al adoctrinamiento y venta de “Ollanta”. Cada uno ganaba 50 céntimos por cada periódico que vendían, la otra mitad está destinada al Instituto de Estudios Etnogeopolíticos, instituto fundado en 1997 por don Isaac Humala. “Ollanta”, el ojo que todo lo ve, tenía un envidiable tiraje quincenal de casi 50 mil ejemplares. Formando cuadros

En Lima, dos años después de la fracasada rebelión de Locumba, se celebró el denominado Encuentro de los Etnocaceristas, en donde el discurso de los organizadores, al igual que las intervenciones de los asistentes, así los gritos de consignas nacionalistas, y aplausos al por mayor, se caracterizaban por contener diatribas contra todo lo que suceda o provenga de fuera de las fronteras de la patria, hasta se recitó en ella; un poema dedicado al dictador General Juan Velasco Alvarado. Por si hubiera alguna confusión, Antauro Humala aseguraba en ese evento conmemorativo a la rebelión de Locumba, que el Etnocacerismo no es de izquierda. “Nosotros consideramos el motor de cambio, antes que un Lenin o un Mao, es un Manco Capac”. Pero acto seguido acepta que “la manera coherente de ser nacionalista, tiene muchas veces coincidencia con la manera coherente de ser socialista en el Perú”. Palabras que no son tomadas en cuenta por las direcciones de los partidos de izquierda en el Perú, como son (Partido Comunista- Patria Roja), y el P.C.P Unidad, ellos al igual que doña Susana Villarán, se suben al “tren de la historia”. De llegar al poder pretenderían refundar la República de corte socialista en el Perú, a sabiendas que el nazi-socialismo es incompatible con sus postulados, pero cuando hay hambre de poder, todo vale. Pregona Antauro que “Santa Cruz y Velasco eran cholos, mestizos, y gobernaron patriotamente. Y que el primer cholo que gobernó traidoramente fue Toledo, por eso le decimos Felipillo”, explica Antauro. “A los cholos antes los empleaban como chulillos. Ahora los emplean como presidentes”, sostiene el Mayor, conteniendo una sonrisa... “Obviamente debió renunciar”, ametralla el mayor Humala, “pero el problema no acaba ahí. Podíamos poner a Jesucristo de presidente del Perú, pero también terminaría con 2% en las encuestas si es que no cambia el sistema”. ¿Cuál sistema? “El sistema impuesto desde el extranjero desde 1532”. El movimiento Etnocacerista se asume como radical, coquetea con ciertas formas dictatoriales, desconoce el Tratado de Paz con Ecuador y es abiertamente hostil con Chile. Claro que en la coyuntura presidencial que se encuentra su hermano Ollanta no le es prudente hablar en ese tono, sobre todo de Chile. “La coherencia, la inteligencia, la lógica, el patriotismo es quemar llantas, es ser radical ante un estado hampón, delincuencial y radical”, manifiesta el mayor Antauro ante la entrevista de un medio de comunicación. Desafiante agrega a su entrevista que: “Desde hace tiempo se está aplicando un proceso de ‘amariconamiento’ de las sociedades de color. Les dicen que la violencia es mala. Mentira, la violencia es un estado natural de todo animal y de todo ser humano”. Sobre las ambiciones políticas del movimiento y su evidente desdén por las formas democráticas, Antauro sólo afirma: “No estamos apurados. Sabemos que podemos ser opción de poder, tanto en formas convencionales como no convencionales”. Leamos el pensar de los Humala: “La violencia involucra movimiento y fuerza, desde el átomo hasta el cosmos. Es energía universal. Física y metafísica. Así pues, la violencia entendida como “partera” es la combinación de velocidad y masa. La velocidad es espacio sobre tiempo, o sea patria e historia. Y la masa es pueblo. Combine Ud. esos elementos en una alquimia que le agregue identidad y milenarismo ¡y ya está, Revolución o Pachacuti!”

(*) Presidente del Movimiento “Altar y Patria”

Fuente: La Razón

TAGS: Humala
Participa:
Valorar
Cargando...
COMENTARIOS
0 comentarios
RADIO G
Programa: Radio música
Radio - Generaccion.com
Ver más
+
MÚSICA
Género musical
Lady Gaga
Taylor Swift
Selena Gómez
Justin Bieber
Miley Cyrus
Daddy Yankee
Linkin Park
2018 Grupo Generaccion . Todos los derechos reservados    |  
Desarrollo Web: Luis A. Canaza Alfaro    |    
Editor de fotografía: Cesar Augusto Revilla Chihuan