Mal haría el presidente electo Ollanta Humala en intervenir en los sucesos de Puno por una sencilla razón: el presidente en ejercicio es Alan García y a él le corresponde el comando máximo de las Fuerzas Armadas y de la Policía nacional.Lo indicado por Fernando Rospigliosi es completamente desatinado y a lo único que contribuiría es para que este gobierno encuentre un pretexto para su mediocridad. Si el conflicto ha llegado a los niveles lamentables que estamos presenciando es porque este gobierno ha sido absolutamente incapaz para diseñar algún tipo de solución.Nada garantiza que Ollanta Humala pueda cumplir con un buen papel en este conflicto porque simplemente no tiene mando ni la administración del Poder Ejecutivo. A menos que algunos deseen su intervención para que llegue al 28 de julio desgastado.Fuente: Mate Pastor