Viernes 17 de mayo 2024 | Contáctenos
A tres días del cambio de mando, algunos de los ministros designados para integrar el primer Gabinete de Ollanta Humala han ofrecido algunas declaraciones que deben servir de pauta sobre la orientación inicial del gobierno entrante. Vale la pena seguirlos en su visión de país, reflexiones y propósitos, aunque parte de ellos nos resulten discutibles. El presidente del consejo de Ministros, Salomón Lerner Ghitis (diario La República, 24/07) ratifica que de todas maneras se aplicará un impuesto a las llamadas “sobreganancias” mineras, pero también revela que todavía no se sabe si será a las utilidades o las ventas. “Se está evaluando”, señala. Un indicador preocupante pues a lo largo de seis meses de campaña, los voceros de Gana Perú dieron la apariencia de conocer al dedillo el modelo impositivo para ese sector.Por otro lado, Lerner dice que habrá reducción del precio de gas aunque no al nivel prometido de 12 soles el balón. Y que habrá aumento del Salario Mínimo Vital a 750 soles pero no automáticamente, pese a las presiones de Mario Huamán y la CGTP para su inmediata implementación. Respecto a la ratificación de Julio Velarde en la presidencia del BCR y el nombramiento de Miguel Castilla en el MEF, comenta: “La designación de hombres no hace a los programas. Los nombres pueden representar actitudes, referencias, pero quien decidirá las directivas de las políticas económicas, SERÁ EL NUEVO GRUPO QUE ORIENTARÁ LOS DESTINOS DEL PAÍS…”.Estas últimas precisiones se enlazan con lo dicho por Kurt Burneo (ministro de la Producción pero quien concentrará el monitoreo de los programas sociales) el pasado 19 de julio, a través de su cuenta Twitter: “Creo que se ha armado demasiado alboroto por quién va al MEF. Recordar que este es tema de equipos más que de individualidades.” Lo que advierte a todas luces que Castilla no tendrá suficiente autonomía en su tarea y será sometido a confrontaciones de opinión económica con Burneo y otros en el Gabinete.El canciller Rafael Roncagliolo (El Comercio, 24/07), zanja muy bien con su antigua vinculación a la dictadura de Juan Velasco, enfatiza sus propios errores y reivindica sus tareas a favor de la democracia, las cuales son ciertas y macizas. Alienta la priorización de las relaciones con Sudamérica y ello se presta a múltiples lecturas. ¿Se hará sucumbir, por ejemplo, el esfuerzo de acercarnos entre las naciones que miramos hacia una sola meta en cuanto a un modelo de desarrollo (como el recientemente formado Bloque del Pacífico) para enredarnos en las cuitas populistonas e infértiles de algunos vecinos? El ministro de Defensa Daniel Mora (EXPRESO, 24/7) viene privilegiando la necesidad del armamentismo peruano dándole nombre y apellido a ese requerimiento: que Chile incumpla la resolución de la corte de La Haya relativa a la delimitación marítima en caso ella sea favorable al Perú. Declaración imprudente por sus cuatro costados y que – insistimos – amerita la opinión del presidente Humala para saber si hay directivas sobre el particular. Paradójico que Mora, dirigente de Perú Posible, anime las compras bélicas cuando su líder – el ex presidente Alejandro Toledo – retrasó al Perú en su apertrechamiento creyendo que el Chile de Ricardo Lagos se allanaría a su ingenua propuesta de desarme unilateral. Falta más por escuchar, incluso antes del 28 de julio.
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