La canciller alemana ha propuesto al presidente español un plan de competitividad que pretende elevar al Consejo Europeo de marzo. Angela Merkel, sin embargo, ha considerado que las reformas que ha hecho España han permitido “recuperar la confianza” en su economía.
La canciller alemana, Angela Merkel, sólo estará en Madrid seis horas, tiempo suficiente para seguir enarbolando su bandera de la austeridad y los ajustes que considera necesarios para que las economías europeas salgan de la crisis. En su visita de Estado a España, Merkel se ha llevado bajo el brazo un plan de competitividad para el resto de países, a cuya aprobación condiciona la ampliación del fondo europeo de estabilización de 750.000 millones de euros, es decir, el mecanismo que ha adoptado la UE para rescatar a los países con problemas de deuda. No es casualidad que la visita de Merkel al presidente español, José Luis Rodríguez Zapatero, sea en vísperas del Consejo Europeo del viernes, en Bruselas. Ha llegado apoyada por la artillería de seis ministros alemanes para predicar su propuesta de pacto de competitividad. Su intención es que salga adelante en el Consejo Europeo de marzo, pero antes quiere que sea asumido por el eurogrupo, los países que comparten la moneda europea...
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