Escándalo en Instituto de Neoplásicas

EL DIRECTOR CARLOS VALLEJOS PRETENDE QUEDARSE EN EL CARGO

El médico tiene jugosos negocios.

Jefe del Inen maneja a su antojo la política del Estado respecto al tema del Cáncer y hace millonarios negocios con esa enfermedad. Piden que no sea ratificado. Su posible reemplazo es acusado sin pruebas de “hostigamiento sexual”. Esta semana un representativo grupo de médicos, entre ellos exdecanos de la orden y expresidentes de los principales gremios, solicitaron públicamente al presidente de la República, Ollanta Humala, y al ministro de salud, Alberto Tejada, que no ratifiquen en el cargo de jefe del Instituto Nacional de Enfermedades Neoplásicas (Inen) y director del Hospital de Enfermedades Neoplásicas, al doctor Carlos Vallejos Sologuren.El pedido argumenta el evidente conflicto de intereses en el que incurre al ser la cabeza absoluta de la política del Estado en materia de Cáncer y al mismo tiempo ser propietario de la principal aseguradora privada para esa enfermedad (Oncosalud) y una amplia red de empresas que venden servicios relacionados. Asimismo, los profesionales de salud del Inen han reclamado el cese de Vallejos Sologuren, mencionando, entre otras irregularidades, el contrato suscrito por el Inen con la empresa GECOPERU (Grupo de Estudios Oncológicos del Perú) fundada por el propio Vallejos y actualmente administrada por su hija, y que es la encargada de manejar los ensayos clínicos de pacientes del Inen. Vallejos es denunciado además por prácticas autoritarias en el hospital que dirige en San Borja, donde, afirman, aplica sanciones a los trabajadores que reclaman por sus derechos o se oponen a la corrupción. Los médicos y enfermeros del Inen acusan directamente a su principal autoridad de fraccionar los gastos para convertirlos en de “menor cuantía” por cifras que involucran decenas de millones soles, en contratos con empresas de servicios y proveedores. Y, por si fuera poco, recuerdan que Vallejos está directamente implicado en el caso de los petroaudios por sus relaciones con el mafioso dominicano Fortunato Canaán, por lo que tuvo que renunciar al cargo de ministro de salud de Alan García, lo que no incluyó su retiro del Inen. Raúl Wiener Redacción

Fuente: La Primera