Este controvertido aparato es un software espía llamado FlexiSpy, que es apto para la mayoría de sistemas operativos para móviles, entre ellos, los Android, iPhone, Simbian y Windows Phone. Este software permite que la persona que contrata la instalación pueda saber con quiénes se comunica el “espiado” a través de su móvil, permite leer todos los mensajes y correos electrónicos que envía y recibe, e incluso escuchar las conversaciones que realiza en cualquier momento del día.
El FlexiSpy ha estado presente en el mercado estadounidense durante estos años, sin embargo, la empresa creadora se ha dado cuenta del gran potencial que existe en el mercado latinoamericano, porque según últimos estudios, los hombres y mujeres latinas son los más infieles del mundo.
Inclusive, fuentes internas de la propia compañía, aseguran que están traduciendo toda la aplicación al idioma español para poder enfrentar a este mercado mundial conformado por latinos y españoles, que según los últimos estudios, registran el mayor porcentaje de parejas infieles, siendo Chile el primer país en la lista.
Pero, ¿cómo funciona este software? El espía solo tiene que instalarlo en el teléfono de su pareja sin que esta se de cuenta. En el mercado estadounidense el pago de este servicio es de aproximadamente 349 dólares anuales y es posible renovarlo sin pagar membresía.
DEL TODO LEGAL
El inmiscuirse en la vida personal de un ser humano sin su autorización es considerado ilegal. En nuestro país más de un personaje ha terminado en la cárcel por revelar información íntima de un tercero. Pero el FlexiSpy tiene un elemento que lo protege de la ilegalidad: la empresa creadora alega que el software ayuda a proteger a los menores o niños de los acosadores y también contribuye a detectar el espionaje empresarial.
Aunque es verdad que el FlexiSpy puede utilizarse no solo para espiar infidelidades, en la práctica su uso se centraliza casi en un 80 por ciento en esta práctica. Incluso, su eslogan publicitario tiene la pregunta: ¿alguien te oculta algo?, en clara alusión al engaño que una pareja pueda estar sufriendo.
La información que se obtiene con este software ha ayudado también a personas que deseaban librarse de una relación tormentosa o convenida, probando que su pareja le era infiel y despojándola de todo beneficio que bien pudiera tener por la antigua vida conyugal. Tenemos aquí un punto a favor de esta conveniente intromisión.
Pero ¿qué sucede si la pareja no es infiel? En conocer al detalle todos sus movimientos no resulta ético ni moral, sino que la práctica se convierte en un hecho descarado de desconfianza que hasta puede volverse enfermizo. Pero para esto también hay una solución: el FlexiShield.
El FlexiShield no es más que el antídoto de FlexiSpy, económicamente conveniente para la empresa creadora que a través del eslogan: “Protégete de los fisgones”, buscar tener una millonaria ganancia que responde a un círculo vicioso de desconfianza.
TAILANDÉS
El FlexiSpy se desarrolla en Tailandia, se comercializa desde el mismo lugar y se programa en Bangkok, donde convenientemente la normativa de protección a la información personal es mucho más flexible y ligera que en Estados Unidos o Europa. Inclusive, sus oficinas de contacto no figuran en estos lugares, sino en el paraíso fiscal de Islas Seychelles, para eludir cualquier responsabilidad que caiga sobre ella.
Con estos pros y contras, el cuestionado software llegará al continente latino en búsqueda de más parejas desconfiadas y de padres preocupados por las amistades o relaciones de sus hijos.
Quizá cuando llegue el momento todos tendremos que comprar un antídoto o FlexiShield para no ser víctimas del espionaje telefónico que quizá nunca podamos detectar ni denunciar. No cabe duda que cuando este aparatito llegue al país se abrirá un gran debate sobre la protección de lo privado. Ahí descubriremos si realmente se defiende la privacidad en el Perú.
¿Y usted qué opina?