Claves para saber vender

En el siguiente texto desarrollaremos algunas claves para aplicar técnicas de ventas que nos orienten al anhelado éxito.

Lo primero que debemos tener en cuenta, es conocer las características de nuestros clientes: ¿cómo son?, ¿qué buscan?, ¿cuáles son sus gustos? Según diversos estudios de mercadotecnia, los clientes hoy en día primero consultan, luego comparan, escogen, definen y concretan una compra. Este es un proceso importante en el que los vendedores deben estar involucrados.

Dentro de este proceso hay un elemento que será decisivo para el comprador: la capacidad de información. Un vendedor bien informado inspira confianza. ¿Preferiría comprarle a una persona que sabe detalladamente del producto o a alguien que busca constantemente en sus manuales la respuesta a sus preguntas?

Pero el estar bien informado no solo significa que uno sepa el abecedario de lo que se desea vender, sino también que el promotor sepa indagar de manera adecuada para obtener también información de parte del cliente. Mientras más detalle se obtenga de las características del cliente, se podrá sectorizar mejor la venta y orientar el producto que más se acople a las necesidades del comprador.

El poder de la información es ilimitado, con ella, nos podemos convertir de simples vendedores a asesores de ventas, guías de servicio con clientes fidelizados que solo busquen nuestra asesoría antes de adquirir cualquier producto. En conclusión: el éxito de nuestro trabajo reflejado en ventas.

Todos los clientes tienen una personalidad definida, tienen preferencias, necesidades y criterios de decisión. Es parte de la técnica de un buen asesor, indagar para descubrir el interior de los clientes y de esta manera saber qué ofrecer; solo de esta forma se podrá combatir a la competencia.

La evaluaciones de mercado y consumo revelan que los usuarios, a diferencia de años pasados, toman en cuenta primero el servicio, luego el producto y finalmente el precio. ¡Qué importante es ofrecer un buen servicio!, esto sin importar el tamaño del negocio o el rubro. Un trato amable y responsable siempre es bien considerado por el cliente.

Otro de los elementos importantes y que hoy está muy en boga es el denominado valor agregado. ¿Cuánto cuesta el valor agregado en comparación a los beneficios que pueden obtenerse utilizándolo? Nada. El valor agregado es un servicio libre de costo para el comprador pero de alta importancia al momento de regresar por más. Un cliente bien atendido que recibe un plus por su compra regresará las veces que sea necesario.

Este adicional no necesariamente debe ser algo material, sino que puede reflejarse en dar una información que no se haya pedido y que se considere importante, en entregar un saludo en una fecha especial, dar una recomendación oportuna o simplemente reconocer a sus clientes por su nombre y apellido, no son más “NN” en un negocio.

Pongamos en práctica estos tips interesantes para lograr el éxito en nuestros negocios. Son herramientas sencillas y económicas que pueden mejorar la calidad del servicio que brindamos. Nuestra inversión: ingenio, indagación y muchas ganas de servir.