Aunque suene inverosímil, el Tribunal Constitucional (TC) emitió un polémico fallo a favor de Pablo Cayo Mendoza, ex empleado de la Municipalidad de Chorrillos, quien presentó una demanda tras su despido en el 2004 por asistir a su trabajo con evidentes signos de embriaguez y negarse a pasar por el dosaje etílico.
Para el máximo organismo constitucional, fue desproporcionado e “irrazonable” despedir a un trabajador que asistió a su centro de labores en ese estado, fallo que ha causado gran polémica y la inmediata reacción de los representantes de gremios empresariales.
La controvertida sentencia que ha originado un gran revuelo reconoce que el trabajador en cuestión cometió una falta grave, pero “en ningún momento ha incurrido en algún acto de violencia, injuria o faltamiento a la palabra verbal o escrita en agravio de su empleador (...) ni ha ocasionado daño alguno al patrimonio ni al acervo documentario de la municipalidad emplazada”.
Es decir, según el TC, si un trabajador asiste a trabajar borracho pero no actúa violentamente, debe ser perdonado. No obstante, ¿qué pasaría si en lugar de labores de oficina el empleado realizara otro tipo de funciones?
PÉSIMO PRECEDENTE DEL TC
Ha sido el propio premier Yehude Simon quien ha lanzado una voz de alerta. “Es un pésimo precedente. Es un error gravísimo del Tribunal Constitucional que nos pone como el ’hazme reír’ en el mundo. El fallo del Tribunal Constitucional es una vergüenza, da muy mala imagen al Perú. Esta noticia debe estar dando la vuelta al mundo. Como primer ministro rechazo esto y llamo a la reflexión., que se corrija de inmediato el error”, fueron sus palabras.
Con evidente molestia expresó: “¿En qué país del mundo, el Tribunal Constitucional falla a favor de una persona que no ha respetado ni a sus compañeros de trabajo ni el lugar donde labora? Que en el Perú, llegar borracho al trabajo no sea causal de despido, es realmente es vergonzoso. Yo estoy seguro que un alumno de quinto de secundaria que no ha estudiado derecho y que tiene lógica en su pensamiento diría todo lo contrario de lo que ha fallado el Tribunal Constitucional y la gente lo aplaudiría”.
A decir del titular de la Presidencia del Consejo de Ministros, en un país como el nuestro donde el trabajo no sobra, los empleados no pueden actuar irrespetuosamente de este modo. “Ninguna persona puede faltarle el respeto a su trabajo, tener trabajo en este país es muy difícil y si te dan la oportunidad tú tienes que cumplir con las normas. Una persona en estado etílico está faltando el respeto a quien lo contrata y a sus compañeros”, sostiene.
PALABRA DE MAGISTRADOS
Sin embargo, para Fernando Calle, miembro del TC, hay una enorme desinformación que crea preocupación entre la población y los empresarios. “Indudablemente, si un piloto de avión o un chofer tienen síntomas de ebriedad confirmadas, son inmediatamente despedidos; no es necesario que causen ningún daño. La ley es muy clara”, precisa el magistrado.
A decir de su colega Carlos Mesía Ramírez, el controvertido fallo solamente hace justicia en el caso concreto del trabajador de limpieza municipal. “Lo que ha hecho el Tribunal es aplicar la ley. En todo caso no está mal el Tribunal, sino la ley, porque el Decreto Supremo 0397 señala que es una falta grave la concordancia reiterada en estado de embriaguez y el Tribunal lo que ha visto en este caso, en el proceso por lo menos y en el expediente, es que no existía ninguna sanción anterior a este trabajador por la misma causal”, aclara.
HABLAN LOS EMPRESARIOS
Pese a las explicaciones de los magistrados del TC, los empresarios no están nada contentos. El presidente de la Asociación de Exportadores (ADEX), Luis Silva Martinot, coincide con el premier en que el cuestionado fallo sienta un mal precedente, puesto que valida acciones negativas que un empleado no debe realizar. “Miles de peruanos pugnan por un trabajo digno. Este tipo de sentencias desvirtúan el buen comportamiento que debe tener un trabajador”, afirma sin tapujos.
Y a juzgar por el presidente de la Sociedad Nacional de Industrias (SIN), Eduardo Farah, la sentencia del TC pone en peligro los valores que deben primar en todo centro de labores, como son la responsabilidad y la disciplina.
Generacción cumple con presentar los argumentos de uno y otro lado sobre este tema que ha causado revuelo y levantado críticas. Puede leer la sentencia con detalle en el siguiente enlace http://www.tc.gob.pe/jurisprudencia/2008/03169-2006-AA.pdf, saque usted sus propias conclusiones.
