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REVISTA

EL POP CORN

Un Óscar al mejor acompañante
Mejor Director, Mejor Banda Sonora y hasta Mejor Película Extranjera, son algunas de las nominaciones ya conocidas en el contexto del Sétimo Arte. En nuestro cine diario, de barrio o de casa, falta un premio adicional, al acompañante indiscutible, sencillo, poco silencioso, compañero natural, que sin flashes ni alfombras rojas, siempre está presente en los estrenos y en las proyecciones diarias de las películas de moda.
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EL POP CORN

Si bien la gastronomía de nuestro país y de nuestra Latinoamérica toda, trasunta sabor, dedicación, historia, variedad, creatividad y buen gusto; tenemos costumbres y leyendas que no podemos pasar por alto, porque forman parte de nuestra idiosincrasia, de nuestros hábitos, buenos o malos, recomendables o perjudiciales, pero que nos remiten a ser parte de una sociedad consumista, original –a veces- y alienada otras tantas.

Costumbres y paradigmas que no podemos ocultar pese al enjambre de buenas razones que tenemos para sentirnos orgullosos de ser peruanos, herederos de una deliciosa cultura inca, con elementos e insumos ofrendados a las deidades a través de los siglos.  Son el maíz, la papa, el cuy, la chicha y algunos tubérculos, claros ejemplos de lo que exponemos. 

Sin embargo tomando formas y maneras diferentes, este maíz, traducido en varias posibilidades de ser llamado, se convirtió en lo que hoy conocemos como pop corn o maíz reventado.

Pese a considerársele un “antojito” o snack, esta explosión de sabor, llamado también palomita de maíz, tiene una historia importante que contar. Es en México donde el maíz tiene una cuna conocida en sus diversas variantes. A propósito de ello, se considera el descubrimiento más antiguo de esta forma de cocción en antiguas cuevas de Nuevo México, que datan de 3600 a. C.

DATOS EXPLOSIVOS DE SU PRESENCIA EN EL MUNDO (1)

En Colombia, durante la época precolombina, los habitantes lo consumían como bocaditos en las fiestas de las ciudades, acompañadas de chicha. Durante la época colonial, los conquistadores encontraron restos de palomitas en tumbas de más de 1500 años. 

En la costa atlántica en el año 1500, habían desarrollado ya, nuevas técnicas para darle un sabor dulce a los explosivos granos: los nativos agregaban sacarosa proveniente de la caña de azúcar molida.

En nuestro país las culturas preincaicas ya elaboraban palomitas de maíz muchas décadas antes de la llegada de los españoles, al haberse encontrado en tumbas restos de ellas con 1000 años de antigüedad.  Estudiosos arqueólogos también encontraron ollas para palomitas de maíz pertenecientes a la Cultura Mochica que datan de 300 d. C.

Alrededor del año 1612, los exploradores franceses documentaron que los indios norteamericanos hacían explotar maíz en potes de arcilla, utilizando arena ardiente. También informaron que durante sus cenas, se consumía cerveza y sopa hechas a partir de palomitas de maíz. Se tiene conocimiento que los primeros colonos estadounidenses comían este maíz en el desayuno, con azúcar y crema.

UNA EXCUSA PARA LA PELI

Si bien la práctica de comer palomitas en los cines se puso de moda en Estados Unidos desde 1912, aquí se ha enraizado tan profundamente que se ha llevado consigo el dato, a lugares desconocidos. Quienes optamos por ver películas en casa, nos hemos llevado también la costumbre a la intimidad de nuestro hogar. 

Reunirse en torno al ambiente y proveerse de buenas dosis de palomitas de maíz, pop corn o “canchita”, como algunos también le dicen, además de las bebidas gaseosas correspondientes, no solo contribuye en el ahorro familiar, sino que provee de un espíritu festivo en el que participa la familia entera, para la buena disposición en afán de la película esperada.

Es necesario apuntar que dada la explosión crujiente del maíz, se debe exponer a su cocción en olla con tapa, a fin de evitar accidentes que atenten contra el plan inicial.  El estallido se origina dado que cada grano de maíz, contiene una cierta cantidad de humedad en su endospermo -núcleo almidonado con hasta 90% de almidón-. A medida que el grano es calentado más allá de su punto de ebullición, el agua dentro del grano empieza a convertirse en vapor, generando presiones internas. 

En la mayoría de los granos, este vapor escapa tan rápido como se forma, pero en estos granos, el vapor no escapa debido al grosor de su corteza.  La presión interna llega a tal punto que la corteza no puede contenerla y ocurre una pequeña explosión.

La fuerza de esta explosión voltea al grano de adentro hacia fuera, es decir el contenido del núcleo es expuesto. La expansión repentina de la explosión convierte el endosperma en una especie de espuma, la cual le da a las palomitas su textura única, la que alrededor del mundo conocemos.

La industria ha ahorrado tiempo al ama de casa y en bolsas selladas, y de diferentes sabores, ha fabricado palomitas de maíz, pipocas –como se dice en Bolivia- o pochoclo, como se le conoce en Argentina, para calentar en hornos microondas. “Pero nada como en casa, haciéndolas tostar para disfrutar de su sabor”, me comenta una entusiasta Priscila, mientras me observa esbozando estas líneas.

Varios nombres nos hacen llegar al mismo producto: rosetas o palomas, en España; crispetas, en Colombia; canguil, en Ecuador; cotufas, en Venezuela y hasta canchita, en el Perú; en donde se diferencia de la llamada serrana, que se sirve como bocaditos en restaurantes o acompañamiento de algunos platos.

Pero más allá de las denominaciones regionales, el cometido principal de este pop corn, es disfrutar del entusiasmo de los niños en complicidad con el ruido y el aroma del maíz en sendos estallidos, que hacen de cualquier película, la escena inolvidable, con un final feliz.

http://es.wikipedia.org/wiki/Palomitas_de_ma%C3%ADz

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COMENTARIOS
1 comentarios      
mil gracias por tu aporte ,te voy a contar una anecdota yo hice palomitas de maiz para el colegio de mi hijo al estilo peru con sal y se lo llevo grande fue la sorpresa pues aqui no acostumbran acomer con sal solo con azucar , cuando la profesora pregunto quien habia llevado ese bocadito a mi hijo le dio verguenza y se quedo callado y uno de sus amigos dijo yo fui señorita y la profesora le dijo que estaba muy bueno , nosotros radicamos aqui en chile .
19 de septiembre 2010
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